Bolsonaro, el líder de la ultraderecha brasileña que asumió su mandato el 1 de enero, hizo su primer viaje al exterior como presidente a Davos. (ARCHIVO)
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, que realizará una visita oficial a Estados Unidos entre el 17 y el 19 de marzo, escogió a la mayor economía del mundo como destino de su primer viaje al exterior para demostrar cuál es su prioridad en política externa, aseguró este miércoles su portavoz.
"Esta es la primera visita de carácter bilateral del presidente al exterior y demuestra la prioridad que el Gobierno le atribuye a la construcción de una sólida asociación con los Estados Unidos", afirmó el portavoz de la Presidencia brasileña, Otavio do Rego Barros, en una rueda de prensa.
Bolsonaro, el líder de la ultraderecha brasileña que asumió su mandato el 1 de enero, hizo su primer viaje al exterior como presidente a Davos, pero para participar en el Foro Económico Mundial, e iniciará el domingo por Estados Unidos una serie de visitas oficiales a países que considera como socios estratégicos y que también lo llevarán en marzo a Chile e Israel.
"La prioridad de la agenda externa brasileña es reforzar la relación con los países que pueden contribuir al desarrollo, la prosperidad, el bienestar y la seguridad de los brasileños", afirmó el portavoz.
Rego Barros aseguró que, además de la reunión bilateral que tendrá con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con el que firmará una serie de acuerdos, Bolsonaro aprovechará la visita para participar en diferentes foros sobre las oportunidades de negocios que el nuevo Gobierno brasileño está abriendo para los inversores extranjeros.
Agregó que, en una demostración de que Brasil también se ha convertido en una prioridad para Estados Unidos, Trump invitó a Bolsonaro a hospedarse en la Blair House, la residencia oficial para los invitados del Gobierno estadounidense que queda en el propio complejo de la Casa Blanca.
"Es una honra que el Gobierno estadounidense concede a apenas algunos jefes de Estado seleccionados", dijo.
Rego Barros afirmó que entre los acuerdos que Bolsonaro pretende firmar en Washington destaca uno en el área tributaria y otro de salvaguardas tecnológicas para permitir que Estados Unidos pueda usar la base brasileña de Alcántara para lanzar cohetes al espacio.
"La visita tiene por objetivo promover una agenda de resultados positivos en diversas áreas, destrabando asuntos que ya estaban en la pauta y abriendo nuevos frentes y oportunidades. Serán tomadas medidas que ayudarán a crear un ambiente propicio para una nueva etapa en esta relación bilateral", dijo.
Según la agenda adelantada por el portavoz, Bolsonaro partirá rumbo a Washington el domingo próximo a las 8:00 hora local (11:00 GMT), con llegada prevista a las 16:00 (19:00 GMT), y ese mismo día tendrá una cena con diferentes autoridades y formadores de opinión en la residencia del embajador de Brasil en Washington.
El lunes 18 de marzo participará en diferentes foros económicos, entre los cuales uno sobre inversiones promovido por la Cámara de Comercio, y otro sobre "el futuro de la economía brasileña" organizado por el Comité Empresarial Brasil-Estados Unidos.
Ese mismo día tendrá una reunión con el exsecretario del Tesoro estadounidense Henry Merritt Paulson.
El martes 19 de marzo, tras reunirse en la Blair House con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, Bolsonaro tendrá una reunión privada con Trump en el Salón Oval de la Casa Blanca.
Los dos mandatarios tendrán enseguida un almuerzo de trabajo y una reunión ampliada, con ministros de ambos países, y enseguida ofrecerán una rueda de prensa de 30 minutos en la Rose Garden de la Casa Blanca.
Bolsonaro viajará a Washington encabezando una delegación que incluirá seis ministros, incluyendo los de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo; Economía, Paulo Guedes, y Justicia y Seguridad Pública, Sergio Moro.
También lo acompañarán el ministro del Gabinete de Seguridad Institucional, general de la reserva Augusto Heleno Ribeiro; y los titulares de Medio Ambiente, Ricardo Salles, y Agricultura, Teresa Cristina Correa.
