Las empleadas de Desarrollo Social preferían comer en horas de trabajo que atender a los ciudadanos que llegaban. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Aunque todavía faltan más de cinco meses para que termine la administración municipal 2016-2019, algunas de las dependencias lucen desiertas y desarrollan poca o nula actividad, mientras que el personal sindicalizado solo cumple con su horario de trabajo aunque dedique el tiempo a otras cosas.
Tal es el caso de la Dirección de Desarrollo Social, cuyo titular, Víctor Habib renunció al cargo y fue sustituido por Fernando Vaquera, quien hasta ahora no ha dado a conocer las actividades que se llevan a cabo en la última etapa de la gestión municipal.
El día de ayer al mediodía, las secretarias de esta dependencia se dedicaban a comprar mandiles a un vendedor ambulante y a comer fruta picada en pleno horario de trabajo, mientras algunos ciudadanos salían de esa oficina molestos porque no se les daba la atención ni la información suficiente sobre el programa de materiales subsidiados para la reparación de viviendas.
Ante este hecho, hicieron notar la falta de control y supervisión hacia el personal de la Dirección de Desarrollo Social, pues además de ingerir alimentos sobre el escritorio, las empleadas no mostraron ninguna atención cuando les pidieron orientación sobre dicho programa, el que hasta hace algunos meses se lleva a cabo con una alta demanda por parte de la ciudadanía.
Algo similar ocurre en otras dependencias ubicadas en el interior de la presidencia municipal, en las que debido a la ausencia temporal o definitiva del titular, las trabajadoras se "escapan" a tomar el almuerzo o a platicar con otras sin tomar en cuenta que la gente sigue acudiendo a realizar gestiones y a solicitar apoyos.
Áreas como de las de regidores también lucen desiertas y abandonadas por sus titulares, quienes básicamente acuden a los actos públicos que desarrolla la alcaldesa en colonias o comunidades, o los jueves cuando se llevan a cabo las sesiones ordinarias de Cabildo, pero el resto de la semana es muy difícil que la ciudadanía los ubique para hacer alguna gestión.
En contraparte, dependencias como la Dirección de Servicios Públicos Municipales, buscan sostener el ritmo de trabajo y prueba de ello, es que el personal trata de atender distintos frentes a su cargo, como el mantenimiento a las áreas verdes, arreglo de camellones, reparación de fallas en alumbrado entre otros.
Otro caso es el de las Direcciones de Protección Civil y de Seguridad Pública Municipal, cuya labor cien por ciento operativa, demanda toda la atención.
Hasta ahora, se han presentado algunas renuncias en áreas como la Oficialía Mayor, cuyo titular Francisco Bardán Ruelas, dejó el cargo y esta dependencia quedó a cargo del jefe del Departamento de Recursos Humanos, José Luis Monárrez.
También presentaron su renuncia los directores de los Institutos Municipal de la Mujer, Leticia Gamboa García y Juan Moreno de Haro, así como el área de Informática, que hasta hace algunos días estuvo a cargo de Haydée Román. A estas salidas se suman las de los regidores Hiram Brahim López Manzur y Omar Castañeda González.
Cuando la alcaldesa, Leticia Herrera Ale dio a conocer públicamente que no buscaría la reelección en el cargo, se comprometió con la ciudadanía a concluir su administración y exhortó a los servidores públicos a mantener el ritmo de atención y servicios hasta el último día.
