El Centro de Integración Juvenil Laguna Durango, reporta un incremento en el consumo de drogas lícitas e ilícitas sobre todo entre los menores de edad.
La marihuana, el cristal y la cocaína, son las drogas de mayor consumo entre los pacientes que se atienden en el Centro de Integración Juvenil, en donde el 65 por ciento son menores de edad. La edad de inicio que refieren va de los 9 a los 10 años de edad. Patricia Ruvalcaba Torres, directora del CIJ en la Laguna de Durango, informó que el 65 por ciento de esos pacientes son menores, que van de los 12 a los 18 años de edad, y el resto son adultos hasta de 50 años. Pero de ese 65 por ciento, el 27 por ciento son niños de los 12 a los 14 años y un 38 por ciento, de los 15 a los 19 años de edad.
En cuanto a las sustancias adictivas legales, dijo que se mantienen el alcohol y el tabaco, mientras que dentro de las ilegales, a la cabeza se encuentra la marihuana, seguido por el cristal y la cocaína.
De acuerdo a las estadísticas, el consumo del cristal sigue incrementándose. Y es que mientras la marihuana cerró el 2018 con un 9 por ciento arriba en relación al 2017, el cristal cerró el 2018 con un 15 por ciento más que en el 2017, es decir, mientras en ese año el consumo era del 20 por ciento de los pacientes atendidos, el 2018 cerró con 35 por ciento de consumo.
Ruvalcaba explicó que hasta hace cuatro años, el consumo del cristal se encontraba en los últimos lugares, pero ha ido ganando terreno. El fácil acceso y la adicción que provoca, son los factores que considera, han sido los principales para que su consumo se dispare.
"Estamos hablando que el cristal hace cuatro años estaba en último lugar, recibíamos de forma esporádica a personas por el consumo de cristal y regularmente eran personas adultas.
La diferencia en estos últimos años, es el aumento de esta sustancia pero aparte el que lo están consumiendo menores de edad, eso es lo preocupante", dijo la directora del CIJ.
Y dicho fenómeno se presenta tanto en pacientes de la zona urbana como rural, ya que el 65 por ciento de los pacientes son de la zona urbana y el resto rural.
En cuanto al consumo de la cocaína, también se ha registrado un incremento, ya que el 2017 cerró con un 23 por ciento de consumo, mientras que en 2018 cerró con un 32 por ciento.
De acuerdo con Ruvalcaba, el consumo de las tres drogas ilícitas registra cifras muy similares a las presentadas en el 2018. Las llamadas benzodiazepinas, medicamentos depresores del sistema nervioso central, han bajado su consumo, sobre todo entre los menores.
El 2017 cerró con un 36 por ciento del consumo mientras que en el 2018, cerró con un 27 por ciento.
Y en lo que va del año, dice que se ha recibido a gran cantidad de menores, muy similar a los registrados el año pasado.
"Estamos recibiendo mucho muchachito con el consumo de las cinco sustancias en general, mucho consumo de marihuana, cristal y benzodiazepinas, son con las sustancias que nos están llegando".
Dijo que hasta el momento, el menor de sus pacientes ha sido sólo uno de 11 años en el 2018, pero por lo regular llegan de 12 años en adelante, "pero ellos refieren haber iniciado en las drogas entre los 9 a 10 años de edad".
