Los apoyos tras la declaratoria de desastre natural por sequía, podrían hacerse efectivos a partir de marzo próximo, para quienes produjeron cultivos básicos. (EL SIGLO DE TORREÓN)
A partir de la primera semana de marzo, podrían tenerse ya los recursos económicos que se habrán de entregar a productores agrícolas que resintieron pérdidas por las condiciones climáticas durante 2018, luego de que el Gobierno federal emitió una segunda declaratoria de desastre natural para atender los efectos generados por la sequía en el estado de Durango.
Joel Corral Alcántar, titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR) en esta entidad federativa señaló que en la segunda declaratoria se incluyó a nueve municipios, entre los cuales figuran Gómez Palacio, Lerdo, Tlahualilo pertenecientes a la Comarca Lagunera, así como Canatlán, Coneto de Comonfort, Nuevo Ideal, Ocampo, San Juan del Río y Santiago Papasquiaro.
Dicha declaratoria de desastre natural se emitió debido a las sequías que se presentaron entre junio y agosto del año pasado, cuando se resintieron fuertes pérdidas en los cultivos de vocación o básicos.
Anteriormente, casi a finales de 2018 se había emitido una primera declaratoria en la que se consideró a 25 municipios de la entidad, por lo que prácticamente todos quedarán incluidos en la entrega de dichos apoyos.
El secretario de Agricultura señaló que en todo el estado de Durango se entregarán apoyos por 105 millones de pesos, que serán para indemnizar a productores de un total de 72 mil hectáreas.
Estos recursos se traducirán en 1,500 pesos por hectárea, hasta por cuatro hectáreas para cada productor, como una indemnización por las pérdidas que se registraron debido a la sequía que se presentó en ese período del año.
Este apoyo incluye únicamente a los productores de cultivos básicos o de vocación como maíz, frijol y trigo; los de hortalizas y fruticultura, así como aquellos que se hayan efectuado fuera del ciclo agrícola, no ingresarán al programa.
El Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) es la instancia encargada de revisar y dar a conocer a las instancias de gobierno, los efectos generados por las condiciones climáticas en cada uno de los municipios, para que se generen estos esquemas de apoyo a quienes hayan resultado afectados.
Corral Alcántar destacó que durante el ciclo primavera-verano de 2018, se presentó, además, una fuerte granizada, mientras que en la última etapa del año, en noviembre pasado, hubo heladas tempranas que terminaron con algunos productos como el frijol, del cual se registraron pérdidas en una superficie de casi 30 mil hectáreas, de un total de 122 mil.
