Desde el jueves, un servidor se enteró que Julio Furch difícilmente podría estar en el partido contra el Cruz Azul. Por un imponderable, "Chava" Reyes le iba a tener que mover al equipo sí o sí. La fácil era como lo ha hecho, hombre por hombre, Eduardo Aguirre por Furch y "san se acabó", sin embargo aquí la fácil no era tan fácil para "Chava", ya que nos hemos dado cuenta que no le tiene plena confianza al "Mudo", entonces por fin le hizo un cambio estructural al equipo, metió a Ulises Rivas, adelantó a Valdés y jugó con un solo 9 que fue Correa.
El parto del nuevo sistema y parado fue muy doloroso, 35 minutos espantosos en el Azteca, lo positivo del primer tiempo fue que se pudo empatar el partido con una jugada nacida a balón detenido. Después Santos mejoró, arrancando el complementario se fue adelante en el marcador con un regalito de Pablo Aguilar, sin ser ninguna maravilla pudo matar el partido con una jugada hermosa que no quiso compartir Javier Correa. Santos supo llevar el partido y lo ganó como se gana en cancha ajena, es lo que hay que ponderar, el resultado, del funcionamiento y futuras estrategias, "Chava" Reyes se lleva un montón de tarea.
Los siguientes partidos nos mostrarán si se sabe sacar y aprovechar lo positivo de esta victoria o se vuelve a lo mismo. La alineación con Ulises Rivas se debe mantener, funcionó mejor la media cancha de esa manera, insisto, sin ser ninguna maravilla y garantía de que todo lo que viene serán triunfos. Las criticas veo que no bajaron de intensidad pero sin dudas este 4-1-4-1 funcionó mejor que el sistema e intentos anteriores.
Es aquí donde veremos de qué está hecho Salvador Reyes, se viene un mes clave para Santos y gracias a un oportuno imponderable, su entrenador tiene más baraja para jugar, ojalá elija bien.
