James Harden (c) llegó a 31 juegos seguidos metiendo al menos 30 puntos. (Especial)
Durante buena parte del encuentro del miércoles, Josh Okogie tuvo la responsabilidad de marcar a James Harden. Y pese a que el astro de Houston brilló con 42 puntos, los Timberwolves no se cansaron de elogiar la actuación del novato nigeriano.
“No fueron 42 puntos fáciles”, recalcó Karl-Anthony Towns. “No se trató de los 42 puntos que ha obtenido recientemente. Tuvo que trabajar duro para lograrlos”.
Towns anotó 25 puntos, Jeff Teague agregó 27 y Minnesota se sobrepuso a otra actuación espectacular de Harden, para vencer el miércoles 121-111 a los Rockets.
Harden logró su 31er encuentro consecutivo con 30 puntos o más. Igualó así a Wilt Chamberlain, con la segunda mayor racha de este tipo en la historia de la liga.
El líder anotador de la campaña en la NBA rebasó la treintena de puntos mediante su 15ta jugada de cuatro unidades en la campaña. Josh Okogie le cometió falta mientras saltaba para conseguir uno de sus característicos triples, y Houston tomó una delantera de 74-67 a la mitad del tercer periodo.
Okogie totalizó 16 puntos y encendió el ataque de Minnesota, que retomó la delantera con una racha de 18-2. El novato se escapó para clavar el balón y consiguió un triple que dio a los Wolves la delantera por 77-74.
Pero la mayor ovación de la noche para Okogie llegó cuando realizó una tapa enfática ante un intento de triple de Harden, con 3:40 minutos por jugarse.
El público se puso de pie, y el encuentro cambió de rumbo.
“Yo sabía que el reloj de disparo se estaba agotando, y que él tenía que generarse algo de espacio para disparar”, relató Okolgie. “Y obviamente, sabía que cuando él da un paso atrás indica que con ese movimiento está listo para disparar, así que creo que sólo adiviné y estuve en lo correcto”.
