Shuichi Gonda (i) y Hidemasa Morita celebran el pase de Japón.
Los favoritos Japón y Australia debieron emplearse a fondo para sortear los octavos de final de la Copa de Asia ayer, acompañados por el anfitrión Emiratos Árabes Unidos.
Japón se clasificó a los cuartos de final al vencer 1-0 a Arabia Saudí, mientras que el reinante campeón Australia doblegó a Uzbekistán en una definición por penales.
Takehiro Tomiyasu le dio la victoria a Japón con un cabezazo de los 20 minutos. Los saudíes generaron pocas ocasiones peso a tener el 75 por ciento de la posesión ante un Japón muy defensivo.
Japón, que busca conquistar su quinto título de la Copa Asia, se las verá ahora con Vietnam.
Arabia Saudí lleva 12 años sin acceder a los cuartos de final. El contrato de su técnico Juan Antonio Pizzi vence tras el torneo y el argentino indicó que no ha sido renovado.
"Nadie de la federación ha hablado conmigo sobre eso", dijo Pizzi. "Estuvimos en su cancha casi todo el partido y fuimos dueños del balón, pero no fallamos en la última jugada".
La concurrencia oficial fue de apenas 6,832 aficionados. La Copa Asia se ha caracterizado por los claros en las tribunas.
En un partido insípido, Australia generó escaso peligro ante Uzbekistán al igualar 0-0 tras la prórroga antes de imponerse 4-2 en los penales.
El rival de Australia en cuartos será Emiratos Árabes Unidos, que le ganó 3-2 a Kirgistán al cabo de un alargue.
