El mariscal de campo de Auburn, Jarrett Stidham, lanzó 5 pases de anotación en la paliza 63-14 sobre Purdue.
Jarrett Stidham pasó para 373 yardas y cinco touchdowns en su último partido como universitario y Auburn despedazó ayer 63-14 a Purdue en el Music City Bowl.
Auburn (8-5) arrolló en el último partido de una temporada que comenzó entre los 10 mejores clasificados, se tambaleó un poco a la mitad y concluyó con una actuación que impuso varias marcas.
Fue la primera victoria en postemporada para los Tigers desde que vencieron a Memphis en el Birmingham Bowl de 2015.
Auburn anotó la mayor cantidad de puntos de un equipo de la Conferencia del Sureste en un tazón, al superar los 61 marcados por Alabama en su triunfo 61-6 sobre Syracuse en el Orange Bowl el 1 de enero de 1953. Los Tigers tuvieron oportunidad de igualar la mayor cantidad de puntos anotados en un tazón con 70, logrados por última vez por Army en el Armed Forces Bowl la semana pasada.
Sin embargo, se hincaron en la yarda uno de Purdue con 61 segundos por jugar.
Stidham, un jugador de tercer año que ya declaró su intención de dejar prematuramente la escuela para entrar al draft de la NFL, tuvo un arranque rápido para los Tigers, que a partir de ahí simplemente dominaron.
Auburn anotó touchdowns en sus primeras ocho posesiones. Eso igualó las marcas del Music City Bowl de más puntos y touchdowns impuestas por West Virginia en 2000, con 5:36 por jugar en la primera mitad. Al descanso, Auburn ganaba por 56-7, con la mayor cantidad de puntos anotados en cualquier mitad en la historia del equipo luego de haber tenido posesión del balón por tan sólo 11 minutos.
