La segunda muerte en menos de un mes de un niño guatemalteco mientras se encontraba bajo custodia de la Patrulla Fronteriza de EU ha causado conmoción y preocupación entre activistas y políticos, que demandan que cese la detención de familias migrantes.
El niño fue identificado como Felipe Alonso Gómez, quien murió el 25 de diciembre en el hospital Gerald Campion Regional en Nuevo México.
“¿Cuantos niños tienen que morir para que pongan un alto a esta situación? No es normal lo que está pasando”, dijo Isabel García, directora de la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona.