Esta droga, a corto plazo provoca graves daños a la salud. (ARCHIVO)
El cristal terminará este año como la segunda droga más utilizada por los jóvenes de la Comarca Lagunera. Esta metanfetamina con alto potencial de adicción y que a corto plazo provoca graves daños a la salud, se posiciona sólo por debajo de la marihuana y por encima de los inhalantes, y en su mayoría es consumida por menores de 17 años.
A unos días de que concluya el año 2018, el Centro de Integración Juvenil (CIJ) de Torreón reporta 615 pacientes nuevos, de los cuales, el 37 por ciento refirió haber consumido cristal. En 2017, se atendieron a 582 personas de primera vez y sólo el 24 por ciento manifestó utilizar esta sustancia.
"Estamos cerrando con un problema que ya lo venimos diciendo desde hace tiempo con el cristal, desafortunadamente pasó a ser la segunda droga de preferencia de los jóvenes, pensamos que es un incremento explosivo que requiere que reforcemos el trabajo", afirmó Rafael Mora Garza, director del CIJ.
Dijo que las pláticas y los talleres que se brindan "ya no alcanzan para alejar a los jóvenes de los primeros contactos con la sustancia" por lo que insistirán ante las autoridades para que la tarea preventiva sea permanente.
Expuso que a nivel nacional, Centros de Integración Juvenil ya elaboró el Plan de Atención para las Adicciones, a fin de presentarlo al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y reforzar la atención, el tratamiento y la prevención.
"Esperemos que tengan la sensibilidad, ahora que el presidente de la República ha mencionado la modificación en el Sector Salud, esperamos que incorpore el tema de la prevención y el tratamiento de las adicciones como un tema prioritario porque así como se necesitan médicos, medicamentos e infraestructura hospitalaria, pues también se necesita reforzar la tarea de la prevención y el tratamiento", añadió.
En febrero de este año, Mora Garza señaló que por el incremento en el consumo de cristal era necesaria la apertura de una unidad de hospitalización en esta región. El costo estimado anual para la operatividad es de 12 millones de pesos y en los proyectos de este tipo intervienen los tres órdenes de gobierno y el patronato de CIJ.
