Un momento especial en donde todos se unieron en solidaridad. (INTERNET)
Los invitados a la boda de Stephanie Agnew y Robbie Campbell, que se acaban de casar en Australia, decidieron solidarizarse con la novia, que perdió la vista en 2017, de una forma especial, usando vendas para los ojos.
Agnew, de 32 años, perdió la vista a los 27 debido a una condición que degeneraba su retina, informa el New York Post.
La enfermedad es hereditaria, por lo que, mientras Stephanie puede detectar algunas sombras, su madre por ejemplo ha quedado completamente ciega.
"El personal del lugar donde nos casamos fue increíble y pasó mucho tiempo con Steph describiendo las características visuales de todo el lugar", comenta Campbell al sitio Fabulous Digital.
DA.
