Juntos. El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, se reunió ayer con el primer ministro chino, Li Keqiang. (EFE)
El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, se comprometió elevar las relaciones entre su país y China a una "nueva dimensión", al comenzar ayer en Beijing una visita oficial al gigante asiático, la primera que realiza un líder japonés en siete años.
Abe llegó la tarde de este jueves a la capital china en respuesta a la invitación del primer ministro chino, Li Keqiang, para que visitara el país del 25 al 27 de octubre.
Tras su arribo a Beijing, el político japonés participó en una recepción para celebrar el 40 aniversario de un tratado de paz y amistad entre las dos naciones, y allí Abe y Li se pronunciaron por trabajar juntos en una serie de proyectos de infraestructura en otros países.
"Hoy, Japón y China están desempeñando un papel esencial en el crecimiento económico, no solo en Asia sino también en el mundo", destacó Abe y afirmó que Beijing y Tokio deben trabajar juntos, ya que "los problemas que no pueden ser resueltos por un solo país se multiplican".
Beijing agradecería la participación de Tokio en los proyectos de infraestructura en el exterior, declaró a su vez el primer ministro chino y enfatizó que las dos naciones "deben seguir el camino de la paz, la amistad y la cooperación".
