Más allá de besos, ladridos y saltos desesperados, un perro puede ser una herramienta para la detección temprana de cáncer.
Y en La Laguna ha comenzado su labor.
Artemisa se ha convertido en una especialista en detección de cáncer.
Es una pastor belga malinois, de tres años de edad, propiedad de Omar Arreola Carrazco, fundador del Centro de Adiestramiento Canino Centinela, quien hace unos días ofreció una conferencia a invitación del DIF municipal de Gómez Palacio, en el marco del Día de la lucha contra el cáncer de mama.
Arreola Carrazco, quien también fue pieza importante de la puesta en marcha del Escuadrón Canino de la Policía Municipal de Torreón, explica que una muestra de orina, sangre e incluso de saliva, basta para que se pueda detectar el cáncer en una etapa temprana.
Cuando se encuentra avanzado o se trata de cáncer de piel, basta con que el perro pase a un lado de la persona para detectarlo.
Dice que es gracias a los aromas sintéticos que fabrica la empresa mexicana El Arca, que se ha podido entrenar a los canes en la detección del cáncer e incluso en la búsqueda de enervantes y explosivos, labor que se desarrolló en Seguridad Pública.
Cuenta que fue durante la conferencia en Gómez Palacio que se puso a prueba a "Canelo", otro pastor belga malinois, a quien se le presentaron varias muestras de orina, y por fortuna, dice, ninguna dio positivo.
La señal de alerta del can, es que se sienta frente a la muestra y no se retira hasta que se premia con una pelota.
Confiable
Las pruebas que realiza el perro son mucho más baratas que las de un laboratorio y son 98 por ciento confiables, además, el cáncer se detecta en etapas tempranas.
