Sin freno. El asalto con violencia es uno de los más graves problemas en todo nuestro país. (AGENCIAS)
Con armas de fuego, blancas, palos, varillas, tubos y otros objetos, un millón de personas sufrieron lesiones el año pasado al momento de ser víctimas del delito en México, principalmente en asaltos, revela la Encuesta Nacional de Victimización (Envipe) 2018, publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Se estima que los afectados, en su mayoría hombres, perdieron económicamente un total de mil 928 millones de pesos, -que equivale a un promedio de 2 mil 197 pesos por persona- de los cuales mil millones los destinaron para atender las afectaciones a su salud, derivadas de golpes o heridas que los delincuentes les propinaron, y 927.9 millones de pesos por la pérdida del celular, dinero, reloj, anillos o aparatos electrónicos, que les fueron robados.
El ejercicio estadístico señala que cerca de la mitad de quienes sufrieron algún delito, es decir, 48.4% fueron agredidos físicamente, 21.2% con arma de fuego al momento de ser atracados por un delincuente, que en 60.3% de los casos resultó ser conocido, de poco trato, cercano o algún familiar.
Los estados que concentran el mayor número de víctimas agredidas físicamente durante la comisión del delito son: Estado de México, Ciudad de México, Jalisco, Guanajuato, Nuevo León, Puebla, Veracruz, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Yucatán y San Luis Potosí.
El espacio donde las personas encuestadas se sienten más inseguras sigue siendo el cajero automático, después están el banco, transporte público, la calle, la carretera, mercado, parques o centro recreativo, plazas comerciales, automóvil, escuela y su lugar de trabajo.
La encuesta refiere que el año pasado se cometieron 33.6 millones de delitos, con 24.5 millones de víctimas, 2.5% más que en 2016; en su mayoría, robo o asalto en calle o transporte público, extorsión, fraude, robo total o parcial de vehículo, amenazas verbales, robo en casa habitación, secuestro, rapto exprés, delitos sexuales y lesiones.
Para el director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas Rodríguez, las cifras anteriormente expuestas significan que la incidencia delictiva con violencia registra una tendencia a la alza en el país, particularmente el asalto en calle o transporte público, con un mayor riesgo de perder la vida. Dijo que el peligro de muerte es muy alto, debido al aumento en el uso de armas de fuego en los eventos que se registran diariamente en las 32 entidades del país.
Rivas Rodríguez aseguró que "no hay una efectividad en la investigación para ver cómo se está moviendo el comportamiento delictivo, para prevenir y reaccionar con efectividad. El conjunto de denuncias debería llevar a la construcción de inteligencia", resaltó.
El académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Guillermo Garduño Valero, enfatizó que el delito en sus diversas modalidades impacta en la salud, seguridad, desarrollo económico y patrimonio de las personas afectadas.
"Yo diría que también el temor de la sociedad que constantemente estamos viendo: personas heridas, baleadas, todos esos factores crean un concepto de inseguridad tal, que inhibe a las personas a desarrollar una vida cotidiana en la esfera familiar, patrimonial y seguridad personal, así de grave es", afirmó.
EVITAN 70 MIL LA PRISIÓN PREVENTIVA
En los últimos ocho años, 70 mil personas evitaron la prisión preventiva por delitos menores que se resolvieron mediante justicia alternativa, revela un informe del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) sobre la consolidación del Sistema de Justicia Penal.
El documento refiere que en 2006 había al menos 84 mil personas procesadas y sentenciadas por robos menores a 2 mil pesos, casos que "hoy pueden resolverse sin prisión preventiva, utilizando mecanismos alternativos de solución de controversias en Materia de Penal".
El órgano administrativo destaca que mientras en 2008 un procedimiento penal se resolvía en 263 días en promedio en el fuero federal y 185 en el fuero común, actualmente, 77% de los casos se pueden resolver en menos de 30 días.
Asegura que el Sistema de Justicia Penal acusatorio necesita más investigación científica del Ministerio Público, no sólo detenciones en flagrancia.
"Necesitamos más capacitación para los operadores del sistema", puntualiza la oficina desconcentrada de la Secretaría de Gobernación (Segob), que desde octubre de 2016 está a cargo de la consolidación del Sistema de Justicia Penal.
En el documento, el SESNSP expone que para lograr la consolidación del sistema, se requiere "acabar con los vicios heredados del viejo método inquisitorio" y garantizar el respeto a los derechos humanos, así como fortalecer figuras como la presunción de inocencia y el uso de la prisión preventiva como medida excepcional y no como regla general.
Señala que ante la realidad que vive el país, los delitos como portación y acopio de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y el robo de hidrocarburo deben merecer prisión preventiva oficiosa.
‘A mi amigo le dispararon porque se puso al brinco’
“A mi amigo le dispararon porque se puso al brinco”, dice Luis Armando, quien comenta que lo que parecía ser una tarde normal, terminó en el hospital por un asalto.
Eran las nueve de la noche, él y sus dos amigos salieron de la casa de uno de ellos, caminaron por avenida Observatorio como lo hacían desde hace años, hasta que dos jóvenes los interceptaron.
“Al momento no reaccioné, nada más vi que se acercaron y dijeron: ‘Ya valió madres’. Cuando volteé vi que mi amigo se estaba peleando con uno de ellos. No sabíamos qué hacer”, narra.
Entregaron algunas de sus pertenencias, pero uno de los ladrones seguía forcejeando con su amigo. Luis intentó ayudarlo, pero en ese momento el otro asaltante lo golpeó para quitarle su celular, el cual se resistía a dar porque le habían robado otro apenas tres semanas antes.
El ladrón le propinó golpes en el costado del cuello y cabezazos en la cara, uno de esos impactos provocó que se le rompiera a la mitad uno de sus dientes frontales. Cuando logró resguardar su celular, corrió a una caseta de policías que está a menos de media cuadra de donde los estaban asaltando, pero uno de los uniformados le respondió que no podía dejar solo el lugar, comenta con frustración.
Al poco tiempo llegó otro policía, quien lo acompañó y al regresar a la zona del robo “encontré a mi amigo tirado en el piso, porque le habían dado un balazo en la pierna, mi otro amigo estaba llamando a una ambulancia. No supimos qué pasó con los rateros”.
A su acompañante los asaltantes le dispararon “porque se puso un poco al brinco” y forcejeó para recuperar la mochila de Luis.
La bala entró a la altura de la espinilla y chocó con el hueso, estuvo hospitalizado una semana y continúa recuperándose.
En la hospitalización gastaron aproximadamente 30 mil pesos, mientras que Luis tuvo que pagar 2 mil 500 pesos por la resina para su diente frontal. Su otro amigo salió ileso porque no opuso resistencia, pero los ladrones le robaron su mochila y un bajo eléctrico, en total se llevaron aproximadamente 2 mil 500 pesos en pertenencias.
