La intérprete de 'Baby One More Time', es fiel a sus seguidores en redes sociales, pues constantemente comparte los viajes que realiza con ellos. 'Nada me hace más feliz como mamá que ver a estos niños crecer, sonreír y reír'. (ARCHIVO)
Han pasado once años desde que la cantante Britney Spears decidio raparse el cabello frente a los paparazzi y la dejó con una carrera que parecía destinada al fracaso. Ser protagonista desafortunados eventos como ser captada en estado alcohólico o casi dejar caer a su bebé en frente de la prensa hizo que la imagen de la superestrella de Hollywood se desvaneciera.
Sus éxitos en la radio y en las premiaciones, así como el noviazgo de ensueño que mantuvo con Justin Timberlake hizo que Britney se convirtiera en un ídolo para las adolescentes. Ambos eran famosos, guapos, millonarios y eran las estrellas del momento.
Aunque su rompimiento fue la noticia del momento, en realidad, él no fue el hombre más importante de su vida. Poco tiempo después, la princesa del pop inició una relación sentimental con su bailarín Kevin Federline, con quien se casó de manera precipitada.
En 2004 contrajo Britney Spears se casó con Kevin, pero tres años más tarde se separaron. Con él tuvo a sus dos hijos: Sean y Jayden. Fue esta separación lo que puso a la cantante al borde de la locura.
A pesar de lo doloroso que le resultó su divorcio, de haber llegado a un acuerdo sobre la custodia compartida de sus hijos y la manutención que la cantante de 36 años le tendría que dar a él, el mismo año, su ex marido y bailarín decidió revisar el acuerdo, pues el monto de 20 mil dólares mensuales que percibía "le parece poco en comparación al éxito que está teniendo Britney ahora", reveló una fuente cercana.
Esto debido que Britney genera, de acuerdo con medios locales, 475 mil dólares por show en las Vegas, donde reside hoy en día.
Su primogénito ahora tiene 12 años y es quien más se parece a su mamá. Por su parte Jayden, de 11 años, es un adolescente que acompaña a su hermano en todas las actividades que realiza, como aprender a tocar piano, lo que ha dejado a Britney como "una orgullosa mamá".
La intérprete de "Baby One More Time", es fiel a sus seguidores en redes sociales, pues constantemente comparte los viajes que realiza con ellos. "Nada me hace más feliz como mamá que ver a estos niños crecer, sonreír y reír".
Después de su matrimonio, Britney mantuvo relaciones sentimentales con el paparazzi Adnan Ghalib; su agente y manager, Jason Trawick; David Lucado, un "bartender" y socio de una firma de abogados. Así como a Charlie Ebersol, un productor de cine con quien salió hasta el 2015.
Desde finales el 2016, Britney tiene una relación con el actor Sam Asghari, quien apareció en su video "Slumber Party". Con él comparte las rutinas de ejercicio que realiza y también el cariño que siente por él, pues lo describe como "su otra mitad".
La famosa y controvertida cantante parece mostrar otra cara en esta etapa de su vida, ya que en una entrevista que concedió el año pasado para el diario israelí Yediot Ahronot , Britney declaró: "Creo que tuve que darme más descansos a lo largo de mi carrera y asumir la responsabilidad de mi salud mental. Hubo muchas decisiones que se tomaron por mí y no yo misma. Los dos niños moldearon mi personalidad, me llenaron, me hicieron menos preocupada por lo que me está sucediendo".
En la misma entrevista mencionó el incidente cuando ella colocó a su hijo, Sean, en su regazo mientras manejaba en 2006. "Fueron los años más difíciles". Mismos que parecen haber quedado atrás.
