Wang en esta colección 2019 apuesta por el tono nude como telón de fondo que contrastan con tonos vibrantes que crean elementos artísticos. (ESPECIAL)
La “sagrada” tradición de vestir de blanco a la hora de llegar al altar es una regla que muchas mujeres han roto con el paso del tiempo, ahora, la famosa diseñadora de moda estadounidense, Vera Wang, ha evolucionado esta traducción con una onda de novia contemporánea.
Con combinaciones de color, Wang presenta en su colección 2019 una apuesta por el tono nude como telón de fondo que contrastan con tonos vibrantes que crean elementos artísticos.
Combinando los corsés y piezas casi de armadura, con sutileza y efecto liso de tejidos superpuestos, son creaciones que afirman que la estadounidense sigue siendo una diseñadora de vestidos de novia que va más allá de los prototipos, y continúa plasmando su romanticismo en sus piezas.
