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Un lujo familiar, cuestión de gusto

TAMBIÉN COMPITEN EN EL SEGMENTO DE LAS SUVS

Batalla final. Dos autos de lujo que se ponen a prueba y demuestran una supremacía en el mercado. (EL UNIVERSAL)

Batalla final. Dos autos de lujo que se ponen a prueba y demuestran una supremacía en el mercado. (EL UNIVERSAL)

AGENCIAS

Audi y Volvo se han convertido (casi accidentalmente) en empresas que comercializan SUVs como principal fuente de ingresos. Por una parte, la firma alemana ha ampliado su catálogo de vehículos utilitarios de manera considerable a tal grado que la familia "Q" esté creciendo hasta llegar a una mayor dimensión con la reciente presentación de la Q8 y en sentido inverso, encontremos la "camioneta" más pequeña de esta marca bajo el nombre de Q2.

Su contraparte, es la recientemente presentada Volvo XC40, la cual de manera previa a su comercialización en nuestro país recibió el galardón de "El Mejor Auto del Año en Europa" y, en cuanto a cualidades se refiere, no se le puede reclamar nada.

Ambas representan la más reciente tendencia de fabricación de las armadoras de lujo: la creación de vehículos que emulan a las formas de carrocerías de las camionetas, pero que, en sus dimensiones, mantienen la proporción y practicidad de un auto compacto.

A razón de la creciente oferta en este nicho, hemos reunido estos dos ejemplares, que desde nuestro punto de vista, representan las mejores opciones del segmento.

Riesgos de naturaleza escandinava. La más reciente entrega de Volvo cristaliza las excelentes impresiones que han generado productos de grandes dimensiones como la SUV XC90 y el gran sedán ejecutivo S90.

La firma sueca tiene tanta confianza en ésta, su SUV más pequeña del catálogo, que tienen el objetivo de convertirlo en su modelo de mejores ventas generales para que les permita comercializar 800 mil vehículos de la marca a nivel mundial en 2018.

En un sentido estricto, no debería de sorprendernos el hecho de que Volvo hoy sea una compañía que basa sus aspiraciones en una SUV, pues siempre se han identificado con la venta de autos familiares y, si hoy este tipo de vehículos son los más demandados, naturalmente tendrían que tornar hacia esa dirección.

Sin embargo, la verdadera sorpresa en la nueva XC40 es la manera en la que Volvo ha ejecutado una inteligente propuesta que, sin contraponer a los fundamentos de la marca, toma interesantes riesgos para no ser "una camionetita más" en un segmento ya poblado.

El primero de estos riesgos sucede en el interior, el cual apela a lo más distinguido del diseño escandinavo para hacernos sentir que estamos dentro de una sala minimalista. Este espacio roba la atención en algo que en cualquier otro auto sería un atropello: la falta de bocinas en las puertas.

La nueva XC40 compensa la carencia de bocinas laterales con una idea que, además de dar más espacio de almacenamiento en las puertas, reinventa la colocación del sistema de sonido de los autos convencionales. Esta SUV equipa un amplificador central que se coloca por detrás del tablero y aprovecha el aire que ingresa al vehículo para otorgar una sensación de sonido envolvente que viene firmado por los expertos de fidelidad, Harman/Kardon.

El resto de los elementos interiores está armonizado de manera agradable para verse y sentirse lujoso con una agradable informalidad que no es común entre los tradicionales vehículos alemanes.

Al tratarse de un vehículo con la premisa de ser de corte familiar, el espacio en el nuevo XC40 cumple de manera adecuada. Aunque este podría parecer un auto más pequeño, no tiene grandes compromisos de practicidad. Los adultos encontrarán una cantidad razonable de espacio para la cabeza y las piernas en los asientos traseros, y la idea de un viaje largo no resulta impensable gracias a la amplia distancia de ejes de su plataforma.

El mayor de los aciertos del Volvo XC40 sucede en el apartado de mayor relevancia: el manejo. El bloque mecánico que compone a la configuración de nomenclatura T5 (versión tope de gama que manejamos) está encabezada por un motor de cuatro cilindros turbo de 2.0 litros que genera 254 caballos de fuerza y una muy agradable capacidad de torsión de 258 libras-pie. Todas las versiones están acopladas a la transmisión de ocho velocidades.

Esta composición brinda una asociación entre un manejo divertido y ligero (altamente favorecido por la construcción de esta camioneta con paneles de aluminio en cofre y toldo) y combinado con el sello principal de la casa: la sensación de un manejo seguro.

El ingenio presente en la XC40 está presente en la manera en la que se han desarrollado las capacidades de agarre, el control del cuerpo frente a un cambio de carril o en situaciones de curva, la firmeza y la agilidad de manejo para que se sienta más útil y de sensaciones más enérgicas tras el volante que los ejemplares de mayor tamaño que ha hecho Volvo.

Con buena lid a sus espaldas. La Audi Q2 no puede negar sus orígenes, es una digna miembro de la familia de Ingolstadt que presume las formas y líneas que predominan en la marca y que vemos presentes desde el A1, hasta el superdeportivo R8, pasando, por supuesto, por la familia "Q", letra que sirve para clasificar a las SUVs de los cuatro aros.

Sin embargo, su diseño exterior agrega elementos que también le suman diversión como el poste "C" con blades que pueden tener distintos colores, una parrilla de grandes dimensiones y salpicaderas traseras que le dan más carácter a esta SUV.

Al interior tiene el espacio suficiente para que cinco personas, sin importar la talla o medida, emprendan un viaje para recorrer largas distancias. No exageramos: cada plaza de asientos presume de gran comodidad y la forma de monovolumen de la carrocería permite que en el interior no se vean líneas en declive que disminuyan la comodidad.

Un elemento que aporta modernidad es el inserto de plástico ubicado en la parte central del tablero y que está decorado con cientos de puntos que forman patrones circulares. Hasta ahí no parece ser nada nuevo. Sin embargo, al entrar o salir del vehículo, por detrás de dichos puntitos se encienden unos LED en color azul que lucen increíbles. Esta solución se repite a los costados de la moderna consola central.

La tecnología está muy presente y de manera muy organizada que se visualiza perfectamente en una pantalla central y desde la cual es posible hacer operar comandos sencillos como el radio, la conexión con el smartphone y los modos de manejo (que hablaremos más adelante) por mencionar algunos ejemplos.

Los motores que se ofrecen en México son dos: un 1.4 TFSI con 150 hp y 184 lb-pie de torque; y un 2.0 TFSI con 190 hp y 236 lb-pie de torque. Ambos cuentan con caja automática S line de doble embrague y siete velocidades.

Esta es una de las mejores aportaciones a su comportamiento en calle y carretera, pues además de ser de respuesta inmediata, es de las mejor logradas para su adaptación a los distintos modos de manejo a los que se puede configurar el más reciente modelo de Audi; entre ellos se encuentran las modalidades eficiencia, confort, auto y el que mejor representa la estirpe de la firma de Ingolstadt, el dinámico.

En cuestión de seguridad se tienen seis bolsas de aire, controles de estabilidad y tracción, sensores de estacionamiento y Audi Pre Sense Front, sistema que reconoce situaciones peligrosas y tiene la capacidad de avisar sobre ellas y de frenar el auto a través de la utilización de un radar. Opcionalmente también se pueden incluir más elementos de seguridad como Control Crucero Adaptativo, Audi Side Assist y Audi Active Lane Assist.

Resolución de compra. Si bien estos dos productos son competencia por pertenecer al mismo segmento, tienen una gran diferencia que complica su comparación: el precio. A pesar de que mecánicamente y tecnológicamente tienen muchas similitudes, la distancia entre las versiones más equipadas es considerable.

Argumentativamente, Volvo XC40 es un vehículo mucho más completo. Con detalles sutiles que elevan un escalón el concepto de elegancia. Desde el plástico y caucho presente en las palancas que controlan las direccionales hasta la sensación de manejo de un vehículo por demás seguro en su andar.

Ambos modelos encuentran en su único bemol el elevado precio para ser vehículos de dimensiones reducidas y sin tantas capacidades de carga. Sin embargo, el mercado ha señalado que esa es la ruta y preferencia de los consumidores y en cuanto a las reglas se refiere, Volvo y Audi han hecho un excelente trabajo.

Al decidirnos entre alguno, nos inclinaríamos por la propuesta sueca. Si el presupuesto no fuera tan benevolente en nuestro favor, la Audi Q2 satisface nuestras demandas más exigentes.

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