Contacto peligroso

Está científicamente comprobado que cuando dos personas se besan, en el cuerpo se produce una infinidad de reacciones químicas y neurológicas. Sin embargo, también se intercambia una gran variedad de microorganismos y bacterias, las cuales pueden causar diversas enfermedades. Una de ellas es la poco conocida “enfermedad del beso”.

Entre 1963 y 1964, la viróloga Yvonne Barr junto a los médicos Michael Epstein y B.G. Achong, todos británicos, descubrieron el virus causante de esta enfermedad, al cual bautizaron como Virus de Epstein-Barr (VEB). También descubrieron que el VEB sólo infecta a dos tipos de células del cuerpo humano: a los glóbulos blancos, también conocidos como leucocitos y a las glándulas salivales.

La mononucleosis infecciosa, es un padecimiento causado por el VEB, una variante del virus del herpes que se transmite principalmente por el intercambio de saliva que se produce al besar o compartir alimentos y utensilios. Se calcula que aproximadamente 90 por ciento de la población adulta la ha padecido, ya que es bastante contagiosa.

Por fortuna, la mononucleosis infecciosa es una enfermedad leve que puede durar de dos a tres semanas y que la mayoría de las veces pasa desapercibida. Sin embargo, este padecimiento causa algunas molestias que deben ser atendidas por un especialista. Se ha comprobado que en casos extremos, la “enfermedad del beso” puede provocar algún trastorno linfático.

Detecta a tiempo

Entre los principales síntomas de la “enfermedad del beso”, se encuentra el dolor y ardor de garganta, fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor abdominal, fatiga excesiva, obstrucción de las vías aéreas e inflamación del hígado, además de un aumento de las secreciones de las amígdalas.

Los expertos aseguran que uno de los síntomas a los que se debe prestar mayor atención es a la inflación del hígado y del bazo, ya que cualquier golpe en el área abdominal podría generar graves complicaciones como una rotura de bazo.

Sin lugar a dudas, el diagnóstico profesional de la mononucleosis infecciosa es indispensable para iniciar con el tratamiento adecuado. Los especialistas aseguran que por el tipo de síntomas, es común confundir este padecimiento con otras enfermedades.

Generalmente, después de analizar las molestias y síntomas del paciente, el médico realiza un examen de sangre, el cual lo ayuda a diferenciar la enfermedad del beso de otras similares causadas por el virus de la hepatitis, toxoplasma gondii, citomegalovirus, VIH, etc.

Debido a que la enfermedad del beso es causada por un virus, específicamente el VEB, el tratamiento solamente incluye reposo, analgésicos para el dolor y antiinflamatorios para aliviar el malestar físico y algunos síntomas, ya que aún no hay fármacos para tratar esta enfermedad viral.

Una vez que el paciente se encuentre recuperado en su totalidad, el virus quedará almacenado permanentemente en su organismo, pero en modo inactivo. Por otra parte, es posible que el virus reaparezca, por lo cual es necesario llevar una vida sana y poner en práctica medidas de higiene.