Finanzas Economía Mexicana Trabajadores México IMSS Empleo Formal Wall Street

CONTEXTO LAGUNERO

TU QUEHACER MÁS IMPORTANTE

JUAN MANUEL GONZÁLEZ TORRES

Con frecuencia vemos personas que todo el tiempo tratan de "pasarla bien" - ¡como si sólo de eso se tratara la vida! -. Para esas personas su sabiduría consiste en saber desperdiciar adecuadamente el tiempo. John Searle, profesor de filosofía en la Universidad de California, Berkeley, refiriéndose a las fallas en la educación, decía: "La meta en la educación no es dejar al estudiante contento; al contrario, una buena educación debe desarrollar un sentimiento permanente de insatisfacción".

La educación nos debe ayudar a tratar de encontrarnos para saber utilizar la vida en nosotros, para no desperdiciarla porque cada uno es responsable de su propio vivir. No debemos escaparnos a la orilla de la vida rodeando la periferia de lo que debería ser nuestra actividad fundamental, la actividad de cada uno, la actividad para la que se nos dio la vida y la cual debemos encontrar nosotros mismos.

Y por lo general, vemos el trabajo como un mal necesario. Aunque, como decía Edison "tampoco se trata sólo de trabajar y trabajar sin sentido". Y Francisco de Quevedo dijo: "¿Por qué permites que trabajo infame sudor tuyo derrame?". El trabajo no es infame, lo juzgamos infame al no encontrarle significado.

Trabajamos porque tenemos que hacerlo. Muy rara vez tenemos clara la forma de cultivar un trabajo significante, que nos permita realizarnos y sentirnos contentos y satisfechos de hacerlo. Las personas valen tanto como su quehacer. Si para alguien su quehacer es muy valioso, se evaluará valioso y lo será.

Y en algunos momentos especiales de nuestra vida, cuando nos sentamos en una noche a ver las estrellas, cuando asistimos a un sepelio, cuando sabemos del nacimiento de un nuevo ser cercano a nosotros y nos quedamos lelos ante el milagro, nos asaltan las preguntas de fondo: ¿Con cuál fin nos hicieron?, ¿Qué vinimos a hacer a este mundo?, ¿De qué sirvió nuestro nacimiento?, ¿Nos estaremos usando bien?

Desafortunadamente, el impacto de estas preguntas pasa en menos de quince minutos, tocamos fondo sólo unos instantes y rebotamos de nuevo hacia arriba, hacia la espuma de la vida. La sensación de no estar haciendo lo más significante de nuestra vida nos da piquetes una y otra vez, muy rara vez platicamos en serio con nosotros mismos, nos comprometemos poco y la vida pasa, sigue su curso.

Decía el maestro Juan Antonio González Aréchiga, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nuevo León, que cuando él muriera, al llegar al cielo no le iban a preguntar si hizo bien o mal en su vida, le iban a preguntar si había sido el mejor Juan Antonio González Aréchiga que pudo haber sido. Porque somos nuestro propio punto de referencia, debemos medir nuestro progreso contra nosotros mismos, ser mejores cada día.

Pero la respuesta más importante a nuestras propias preguntas de fondo no está afuera. Todo lo importante y lo más interesante pasa dentro de nosotros mismos. Lo que hacemos exteriormente es producto de la acción que provocamos en nuestro interior. Debemos aprovechar el tiempo y usarlo bien. El tiempo no pasa, los que pasamos somos nosotros, el tiempo se queda.

No por ser mexicanos tenemos que pasarnos la vida "dejándola que pase", sin hacerle frente. Dentro de los atuendos festivos o bajo los andrajos, debemos actuar la vida enfrentando la realidad para cambiarla por una mejor, poniendo adelante lo que somos capaces de ser.

Como decía Ortega y Gasset: "La vida es un tener siempre que hacer algo; la vida no se nos ha dado, tenemos que hacérnosla cada uno de nosotros, no nos la dieron hecha", Amado Nervo lo dijo: "somos arquitectos de nuestro propio destino", no hay a quién echarle culpas.

Creernos hijos de Dios no nos exime de la responsabilidad de usarnos como hijos de Dios. El ser hijos de Dios lo debemos demostrar con hechos. "Por sus obras los conoceréis", todos nos conocerán por nuestro quehacer.

Francis Bacon -filósofo y político inglés-, afirmaba que: "El tener buenos pensamientos es agradable a Dios, pero a los hombres no los beneficia en nada que tu tengas buenos pensamientos, a menos que esos buenos pensamientos los conviertas en acciones".

En un manual de capacitación para ejecutivos de una compañía global dice: El éxito de una persona en su vida, o inclusive el éxito de su grupo, no depende de lo que sabe o saben, ni depende de quienes son, sino depende de qué es lo que hacen con eso que son y con eso que saben".

No importa a cuál quehacer te dediques, lo verdaderamente importante es que vibres con ese quehacer, que te provoque pasión al hacerlo y que sientas la necesidad de hacerlo. Puedes llegar a ser más tú cuando encuentres tu propio quehacer.

Leer más de Finanzas

Escrito en: JUAN MANUEL GONZÁLEZ TORRES

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Finanzas

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1473916

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx