Transcurre el Mundial y está cumpliendo con su principal objetivo, entretener. Hemos visto de todo, pero sobre todo la esencia del juego, drama y alegría, agonía y éxtasis. En el segundo día los tres partidos se definieron en las compensaciones, obvio destacando el hermoso espectáculo del empate a tres entre españoles y portugueses. Incluso en el partido más criticado, el inaugural, existieron dos goles de los cinco que anotó Rusia marcados por un hombre que entró de emergencia al juego, el zurdo Denis Cheryshev, dos auténticas joyas, el primero amaga dentro del área que va a patear y pica el balón para quitarse a dos árabes que pasaron patinándose, se acomoda la pelota con parte externa y cuando el ángulo se cerraba y otro defensor ya se barría, saca un zapatazo que se mete arriba. El segundo, conduce en diagonal y decide al borde del área utilizar de nuevo su arma favorita, su zurda educada, otra vez parte externa y el balón obedece y se anida en la escuadra, un portento. Injusto me pareció que nadie destacara en medio de las críticas a la pobreza técnica de los árabes estos dos gestos de este zurdo que se echó al bolsillo a los medios rusos que antes de iniciar la Copa destrozaron al seleccionado anfitrión.
Y no fue en el tercer día, si no en el segundo donde surgió el cristianismo en esta copa, CR7, ese ciborg, mitad hombre, mitad robot, la máquina perfecta, poderosa e infatigable, pero con alma y corazón. Irónicamente, Cristiano Ronaldo héroe de mil batallas dio el partido de su vida, en el escenario inmejorable de una Copa del Mundo y no sólo defendiendo, sino literalmente cargando a una nación entera. Fue el hat trick más impresionante del nativo de Funchal capital de la isla de Madeira, contra un coloso, contra uno de los tres favoritos a ganar la Copa, provocando y convirtiendo un penal, después De Gea no puede creer que CR7 patee de zurda y la trucha se le escapó. El tercero lo firma robocop, trayectoria: cuando la partícula (en este caso el balón) se mueve, el extremo del vector posición r describe una curva C en el espacio, que recibe el nombre de trayectoria (o golazo). Así lo calculó CR7 y así lo ejecutó.
Turno para otro favorito, Francia con un grupo de jóvenes talentosos que lucieron nerviosos en su debut mundialista contra unos australianos con un sorprendente oficio que le complicaron hasta la desesperación el juego a los galos, al final un aliado inesperado le avaló el triunfo al equipo de Didier Deschamp, el mentado VAR. Perú con varios "mexicanos" nos recordó aquella versión de los años sesenta y setenta de nuestra selección, inspiradores de aquella frase: "jugamos como nunca, perdimos como siempre". Hicieron todo para derrotar con cierta tranquilidad a los daneses, pero hasta un penalty erraron, una pena, no lo merecían.
¿Y Argentina? Pues el tango es inacabable, no pudieron vencer a unos tozudos islandeses que ya habían dado muestras de un impresionante progreso cuando en la Euro 2016 eliminaron a Inglaterra en octavos, compitieron en el primer tiempo y en la complementaria el diez por ciento de la población de la isla se metió en su propio campo y logró resistir a un poco imaginativo equipo argentino, con un Messi otra vez al 25 por ciento de sus capacidades que volvió a desperdiciar un tiro penal.
Entretenido, ameno, emocionante, así ha estado el arranque de Rusia 2018, hoy entran en acción dos favoritos más, contra dos equipos si no fáciles si vencibles, México va contra Alemania y Suiza contra Brasil. Germanos y amazónicos suman nueve copas y los brasileños se mueren de ganas de toparse a los teutones para vengar la afrenta del mundial pasado en su mismísima casa. Las posibilidades de aztecas y helvéticos lucen sumamente improbables, los suizos, seguro echarán mano a su famosa defensiva para sembrar de púas su campo para estorbar a Neymar, Coutinho, Firmino y compañía. Los mexicanos son un enigma, ¿jugarán temerariamente? o ¿aplicarán la de los islandeses? Primer tiempo manteniendo dos o tres hombres de ataque en territorio alemán y si las cosas resultan, en el segundo dejar a un solitario esforzado correteando balones y el resto atrás. Buen Mundial hasta ahora, ojalá siga en ascenso.
