Filtrar videos íntimos es penado en algunos estados de México. (Especial)
La filtración de videos íntimos es una práctica que con el paso del tiempo se normaliza cada vez más, principalmente por el avance de la tecnología y la confianza que las víctimas depositan en los victimarios.
De acuerdo con el Centro de Estudios Sociales de la Opinión Pública, el 84% de los mexicanos considera que su información en las redes sociales no está completamente segura y el 37% menciona haber sido víctima de un delito.
La filtración de este contenido en las redes sociales es catalogado como “pornovenganza” y aunque no es considerada como un delito en todo el país, algunos estados como Yucatán y Chihuahua la contemplan como una falta delictiva en la legislación.
En el 2003 Nueva Jersey, EU, ya avanzaban en su criminalización prohibiendo a cualquier persona la distribución y venta de fotografías y videos con contenido sexual explícito sin la previa autorización de los individuos.
En México, se presentó una iniciativa de ley ante el senado para reformar el Código Penal Federal, con el objetivo de sancionar a quienes difunden este tipo de contenido, sin embargo esta propuesta permanece “congelada”.
Filtrar videos íntimos es penado en algunos estados de México. (Especial)
