Las redes sociales, nuestro universo paralelo. El lugar a donde muchos vamos a informarnos y a desahogar nuestras frustraciones y penas. Un genio el que las inventó, que maravilla de instrumento, una forma de expresión para sentirse único, especial y ser escuchado.
Como todo buen invento, cuando las redes caen en manos equivocadas pueden ser peligrosas. Como todo buen invento a las redes también se les puede dar mal uso. Como todo buen invento empiezan a tener vicios. El más grave vicio de las redes son los mentados "likes", por un like la gente se vuelve políticamente correcta y eso tuerce muchas veces la realidad, crea corrientes de pensamiento facilonas en temas de actualidad y esconde muchas veces la verdad. Por eso surgen en redes los animalistas, los que andan en bici, la gente fit y muchas ONG, etc... Utilizan una causa para mostrar superioridad moral aunque en su vida privada sean unas verdaderas amenazas, nadie le va a negar un like a alguien que ayuda a un perrito, a alguien que va al gimnasio o a alguien que pide cuidar el planeta, no todos pero muchos de ellos y ellas lo hacen por los malditos likes.
Hoy hay dos temas en nuestro medio futbolístico: Juan Carlos Osorio y Matías Almeyda. Del primero lo fácil y lo que da likes es decir que es un imbécil, del segundo lo contrario, los likes van a llegar si dices que es un santo maltratado. ¿Cuál será la realidad? Como siempre, es más simple de lo que imaginamos; Juan Carlos Osorio simplemente es un entrenador cuyo estilo no compartimos pero no es mal técnico, es incluso mejor que varios que han estado en esa silla, los números son claros. Tiene lamentablemente ese 7-0 que marcó su proceso y dio armas interminables a sus críticos que por xenofobia desde el día 1 están sobre él. Hizo una muy buena Confederaciones que por un robo arbitral (que nadie mencionó porque no da likes) no coronó con el tercer lugar. Al mundial va como iría cualquier técnico mexicano, por la hazaña de quedar entre los primeros 8, los sueños guajiros de "ir por la Copa" también es a causa de buscar likes, los futbolistas también ya están contagiados.
De Matías Almeyda: Chivas y su dueño cayeron en desgracia económica por razones legales, los presupuestos bajarán y se notará en todas sus áreas, a Almeyda se le debió notificar de eso y si quiere renunciar, ni modo, pero Chivas quiso evitar lo anterior y quedar bien con dios y con el diablo. Por miedo a las redes sociales cayó en un error más grave, perdieron credibilidad y pusieron a Almeyda como mártir. Hoy intentan corregir y esperar que Almeyda siga o renuncie, eso debieron hacer desde un principio y no tratar de tapar las cosas, hoy las oleadas de likes están con quienes defienden a Almeyda y hacen trizas a Chivas, Almeyda a pesar de no renunciar por buscar su jugosa liquidación está quedando como el bueno de la película y les está ganando la batalla.
Ayer hice una dinámica que leí en Twitter de no decir lo hoy políticamente correcto, tuiteé que NO votaría por López Obrador y lo fijé en mi perfil. Hubo de todo pero no me fue tan mal como pensé. No pasa nada, al final nadie se arrepiente de ser valiente o de decir la verdad. Dejemos de perseguir likes y de temer decir cosas que van en contra de la mayoría. Vale la pena.
@manyecastil
