Petición. El vicepresidente estadounidense Mike Pence pidió la expulsión de Venezuela de la OEA. (AP)
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, declarará ayer que, con Nicolás Maduro en el poder, la democracia en Venezuela está "muerta", y pedirá a los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) que expulsen a esa "dictadura" del organismo continental.
En una recepción ofrecida a 22 de los 34 países que son miembros activos de la organización, que celebra estos días su Asamblea General, Pence dará un discurso en el que tratará de convencer a esas naciones de que suspendan a Venezuela de la organización.
"Las mal llamadas elecciones que se produjeron hace dos semanas solo ratificaron una triste verdad: Bajo Maduro, la democracia en Venezuela está muerta", dirá el vicepresidente estadounidense en la recepción, según extractos de su discurso adelantados. A la cita están invitadas las delegaciones de los 14 países miembros del Grupo de Lima, los más activos ante la crisis en Venezuela: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guyana, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.
También están convidados otros ocho países de la región: Bahamas, Barbados, República Dominicana, Ecuador, Jamaica, Uruguay, San Cristóbal y Nieves y Trinidad y Tobago.
Hoy se votará, en la Asamblea General de la OEA, una resolución impulsada hoy por Estados Unidos y seis países del Grupo de Lima (Argentina, Brasil, Canadá, Chile, México y Perú) que permitiría convocar una reunión extraordinaria para pronunciarse sobre la suspensión de Venezuela. Mientras que Nicolás Maduro dijo que hará una celebración nacional cuando el país termine de retirarse de la OEA, que calificó como un ente "inútil".