Medida. Analistas señalaron que se adoptaron insuficientes medidas para combatir ciberataques. (ARCHIVO)
El CEO de Solcomp Technologies, Luis Serrano, consideró que instituciones financieras con vulnerabilidades en conexión al Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) fueron copartícipes del reciente ciberataque.
Lo anterior, derivado de que estas entidades adoptaron insuficientes medidas para gestionar los riesgos informáticos y de sistemas tecnológicos, estimó el también experto en ciberseguridad.
"Si hubieran tenido gestión de cuentas privilegiadas no se hubiera dado el caso", refirió, tras participar en el IV Congreso Internacional de Prevención de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita y Financiamiento al Terrorismo. En este marco, descartó que el riesgo residual del referido ciberataque a la conexión del SPEI, es decir, la afectación posterior, involucre a todo el sector financiero que hace uso del esquema de transferencias del Banco de México (Banxico).
Más bien, precisó, será una carga que deberán absorber las instituciones financieras involucradas. "El riesgo residual se caracteriza por entidad y es una manifestación de las tareas no realizadas en cada institución financiera, ahora las contramedidas tienen que ver con una reorganización interna para ver qué medidas se están llevando a cabo correctamente y que otra se puede mejorar", dijo.
En su opinión, dependerá de las acciones para mitigar el riesgo residual de las instituciones afectadas lo que determine el daño colateral de los hackeos en la conexión al SPEI y entre los cuales el más grave puede estar en la destrucción de su reputación.
En cuanto a las investigaciones realizadas por las autoridades, Serrano aseguró que habrá que esperar el resultado de las indagatorias. Sin embargo, reconoció que es un modo de operar de la ciberdelincuencia en el que no se pueden descartar infiltraciones al interior de las organizaciones, por lo sofisticado del proceso de inteligencia requerido.
SE INTEGRA MONEX
Banco Monex anunció su incorporación como miembro del sistema internacional que liquida operaciones de mercado cambiario en 18 monedas (CLS, por sus siglas en inglés), y en el cual se saldan más de cinco trillones de dólares al día.
La institución financiera señaló que es la primera entidad de Latinoamérica, no subsidiaria de un banco internacional, en ingresar al CLS donde operan otros 69 bancos líderes en el mundo.
El director general de Grupo Financiero Monex, Mauricio Naranjo, destacó que la integración del banco filial al CLS es un paso muy importante para la institución, debido a que el peso mexicano es la moneda más negociada en la región de América Latina, y la mitigación del riesgo de liquidación es una prioridad clave para muchas entidades.
"La participación dentro del ecosistema de CLS permitirá alcanzar este objetivo para nuestras operaciones y a través del tiempo para nuestros clientes, así como mejorar de manera significativa las eficiencias de liquidez", explicó.
Héctor Lagos, expuso que la iniciativa demuestra que la institución está constantemente mejorando sus servicios y soluciones financieras, "por lo que es imperativo garantizar la agilidad de nuestro servicio, y por ello decidimos formar parte de CLS".
El CEO de CLS, David Puth, agregó que los miembros liquidadores en el sistema, como Banco Monex, desempeñan un papel fundamental para garantizar que los participantes del mercado tengan acceso al más alto estándar de mitigación de riesgos para respaldar sus operaciones comerciales".
Apoya restricciones
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) señaló que las disposiciones del Banco de México (Banxico) en materia de tarjetas de débito buscan subsanar las asimetrías existentes entre este producto y los plásticos de crédito, respecto el tiempo para restituir el importe en casos de reclamo por los tarjetahabientes. Según el documento Consideraciones de Condusef: "Proyecto de nueva norma en materia de tarjetas de débito emitida por Banco de México", Reclamaciones con impacto monetario por consumos no reconocidos en Tarjetas de Crédito (TDC) y de Tarjetas de Débito (TDD), las propuestas obligan a las emisoras de plásticos de débito a depositar en la cuenta del reclamante a más tardar el segundo día hábil bancario el monto equivalente a los cargos realizados en esa cuenta.
Lo anterior, aclara, siempre y cuando correspondan a operaciones realizadas durante las 48 previas a la presentación de la reclamación que realice el cuentahabiente de los cargos no reconocidos. En la actualidad, precisa el texto, cuando se presenta una reclamación en tarjeta de crédito, el cargo reclamado se congela hasta llevar a cabo la aclaración, mientras que por el contrario opera diferente cuando se trata de una queja por igual concepto en tarjeta de débito, donde el perjuicio económico permanece hasta que no se lleve a cabo la aclaración, "esto hace que el tiempo juegue en contra del usuario".
