Los contrarios se atraen
Este viejo adagio o principio en la Física se aplica desde hace cierto tiempo en la sociedad mexicana.
Partimos de los hechos que nos confirman el citado principio físico. Resulta que en Guerrero, el Obispo de Chilpancingo de nombre Salvador Rangel se entrevistó con los capos del crimen organizado de su diócesis. Solo una monja y él subieron a las guaridas de los malosos para pedirles que no asesinaran a los candidatos para los cargos públicos en las próximas elecciones. El poder religioso protegiendo al poder civil. Diversas posturas se han manifestado por la acción del prelado. Él declara que lo hace para cuidar de sus fieles y sacerdotes. Los mafiosos se comprometieron a no hacerlo siempre y cuando el voto no se comprara. Algunos aprueban las acciones del obispo. Otros no.
Colocando las posiciones en un tablero social, se puede decir que ahora los personajes y tareas están invertidos. Los clérigos haciendo de pacificadores con los maleantes organizados, y los mafiosos convertidos en defensores de la legalidad. Mientras la autoridad solo especula y deja pasar y deja hacer.
Otro enunciado científico, ahora tomado de la medicina: nos indica que la sangre de los seres con sistemas sanguíneos, es de dos clases: la sangre venosa y la sangre arterial. Una va limpia, la otra sucia. Si se llegaran a revolver, el colapso sería fatal. La muerte es segura. Igual pasa con nuestra sociedad, y ello va creciendo cada día más. Ahora los malos son o pretenden ser la ley y los buenos se convierten en sucios y asquerosos. Sin embargo, como este hecho casi pasó inadvertido, es necesario desmenuzarlo para poderlo valorar. Por qué los criminales desean que no se compre el voto? Elemental. Porque ellos no quieren competidores, solamente ellos desean acaparar a los votantes para obtener como contraprestación el tener autoridades a su favor. La sangre se revuelve.
Pero esto, no es tan inocuo como pudiera ser. El crimen organizado quiere tener controlados los municipios y zonas de Guerrero (y de todo el país) para apoderarse de la logística que tiene toda autoridad: información, datos, indicios, censos, padrones, etc., y en general tener a la mano el mapa social, geográfico, económico, etc., del municipio para delinquir a sus anchas. Así, autoridad y población serán rehenes y clientes de los cárteles criminales como en el caso de Nayarit, con el gobernador saliente y el Fiscal preso en EU “ La iglesia en manos de Lutero” ¿Será?
La compra del voto es el entrecruce de las venas con las arterias en nuestro sistema electoral, ahí se inicia toda la corrupción que baña al cuerpo social de nuestro tiempo. Y ya sabemos que esa revoltura es la muerte, en este caso la del cuerpo de nuestra sociedad agónica. Hoy, no existe campo o actividad humana en México, donde no escurra sangre. Ese sangrado se inicia en el acto consentido y practicado por autoridades y todos los partidos políticos: la compra del voto es la muerte de la democracia. El pecado original.
Podremos hacer transfusiones a estas alturas de los tiempos? Los candidatos todos, omiten, callan, fingen demencia o se hacen los desentendidos. No tocan el tema de la violencia ni del crimen organizado. Se hacen como si no existiera tanta violencia y tanta sangre. Andan por las ramas, pero están prestos a iniciar cuanto antes la compra de votos; ya se oyen los rumores y se alistan los fajos de billetes para lograr que las cosas sigan como están. Los malos buscando la legalidad y los supuestamente buenos revolviéndose con los malos. ¡Por eso: los contrarios se atraen. ¡Les gusta y conviene cambiar de papeles en el drama nacional, pero para que todo siga igual!
Miguel Ángel Hernández
Torreón.
