Igual que en México, este año habrá elecciones en Estados Unidos (EU); cambiará un tercio de los escaños del Senado, la totalidad de 435 puestos en la Cámara de Representantes y 36 gobernadores, el 6 de noviembre. En estos días de mayo hay votaciones primarias en siete estados -sobresale Pensilvania, centro de esperanza demócrata- y luchas por dicho poder, campañas, motivo por el cual no es posible la firma de un renegociado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 2018. Correspondería al nuevo presidente mexicano signarlo, en su caso, con el norteamericano y el canadiense en 2019 -agenda original-, mediante el necesario aval de las correspondientes legislaturas, con el agravante de que, cierto, un cambio de color partidario -ahora republicano- en el Capitolio pondría en jaque la política legislativa de Donald Trump.
El martes pasado, 15 de mayo de 2018, elecciones primarias en Pensilvania, Idaho, Nebraska y Oregon comenzaron el prólogo de lo que pudieran ser las votaciones de noviembre, un termómetro social sobre el partido republicano y la administración de la Era Trump al llegar a la mitad de su mandato, dos años antes de los comicios presidenciales del 2020.
Lo que está en juego es el control del Congreso de Estados Unidos y de las legislaturas estatales, de manera simultánea a la sucesión presidencial en México y de la nueva configuración del Congreso de la Unión.
Los demócratas prendieron luces de alerta tras el resultado de las primarias en Pensilvania, donde cuatro mujeres candidatas a la Cámara de Representantes que participan con plataformas socialistas ganaron las elecciones el martes 15 de mayo. Summer Lee, abogada y organizadora de trabajadores; Elizabeth Fiedler, ex periodista de una radio local; Sara Innamorato, fundadora de un grupo de defensa de mujeres, y Kristin Seale, que trabaja en una organización sin fines de lucro para la conservación de energía, recibieron el suficiente apoyo electoral de Socialistas Democráticos de EU para desplazar a los actuales funcionarios.
Una semana antes, en Virginia Occidental el llamado Barón del Carbón, Don Blankenship, aumentaba sus posibilidades de ganar las primarias republicanas para ser candidato al Senado; tal sucedía la noche del 7 de mayo, pero al día siguiente, jornada de votación, mordió polvo al derrumbarse su popularidad ante el triunfador Patrick Morrisey, fiscal general republicano del estado, quien competirá en noviembre contra el senador demócrata conservador Joe Manchin. También fue derrotado el representante Evan Jenkins. El magnate Don Blankenship, ex director ejecutivo de la compañía de carbón Massey Energy estuvo condenado a tres años de prisión tras la muerte de 29 mineros en el desastre de Upper Big Branch en 2010, convicto.
En Ohio, Richard Cordray, quien fue primer director de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, derrotó al ex legislador Dennis Kucinich; en noviembre enfrentará a Mike DeWine para determinar quién reemplazará al gobernador saliente, John Kasich.
En Indiana, Greg Pence, hermano del vicepresidente, Mike Pence, ganó las primarias republicanas en las que se disputaba un escaño en el Congreso.
Sorprendió el número de candidatas mujeres en veinte primarias abiertas del Partido Demócrata para la Cámara de Representantes y donde los votantes eligieron una en diecisiete de ellas. En Ohio, como ejemplo, Rachel Crooks -una de al menos diecinueve mujeres que acusaron a Donald Trump de acoso y ataque sexual- ganó la votación sin rivales.
El 22 de mayo, las primarias serán para gobernador y Cámara de Representantes en Arkansas y Georgia, mientras en Kentuky sólo para la segunda. Proseguirán de junio a octubre.
Los republicanos controlan la Cámara de Representantes con margen de 238 sobre 193; persisten cuatro vacantes. De las 100 bancas del Senado, 35 se disputan; los republicanos controlan 51. De los 36 gobernadores a renovar, 26 son republicanos en la actualidad.
Miles de senadores y representantes a nivel estatal serán elegidos o dejarán sus puestos. Importante porque los electos en los estados en otoño influirán en la redefinición de los distritos electorales para la Cámara de Representantes y legislaturas estatales del censo de EU 2020.
Los resultados de noviembre determinarán si los republicanos y el presidente Trump logran que el Congreso apruebe sus prioridades, entre las que hay, sin duda, sombras de Estados Unidos sobre México.
@kardenche
