Las protestas palestinas en la Franja de Gaza y Cisjordania contra el traslado de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén, en el día en que Israel cumple 70 años, terminaron en una matanza perpetrada por las fuerzas armadas israelíes ayer.
Hasta el cierre de edición, el saldo de lo que el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu llamó "un día histórico", era de 58 manifestantes muertos, siete de ellos menores de edad, y 2,771 heridos, en una jornada en la que unas 40,000 personas participaron en marchas hacia la divisoria en la franja palestina.
A pesar de que el presidente estadounidense Donald Trump asegura que el traslado de su sede diplomática en Israel y el reconocimiento de Jerusalén como capital israelí "servirá para avanzar hacia la paz", la jornada de inauguración de la legación ha sido sangrienta, con el mayor número de muertos en un día desde 2014.
Según el Ministerio de Salud palestino, en las protestas han muerto 58 personas, en su mayoría jóvenes de entre veinte y treinta años y al menos siete de ellos adolescentes.
Además, 2,771 personas han tenido que ser atendidas, 1,373 de ellas por heridas de bala o metralla, de las que 54 están en estado crítico, otras por golpes y contusiones (varias de ellas de las latas que contienen los gases lacrimógenos) y el resto por asfixia a causa de su inhalación.
"Vamos a marchar hacia Jerusalén contra el traslado de la embajada estadounidense. Jerusalén es la capital de los palestinos y todos estamos unidos contra la decisión de Estados Unidos", dijo Isam Baqer, participante de la marcha en Ramala.
Mientras tanto, en Jerusalén, al descubrir la placa en la que hasta ahora fue sede consular estadounidense, la hija de Donald Trump, Ivanka, dijo: "en nombre del 45 presidente de los Estados Unidos de América, les damos la bienvenida oficialmente, por primera vez, a la Embajada de Estados Unidos, aquí en Jerusalén, la capital de Israel".
En respuesta, Netanyahu dijo: "Presidente Trump, con reconocer la realidad usted ha hecho historia (...). No tenemos amigos mejores en el mundo, ustedes defienden Israel y defienden Jerusalén. Gracias".
La decisión de Estados Unidos de trasladar su embajada a Jerusalén provocó una ola de reacciones en todo el mundo, por considerarla ilegal, deplorable y una afrenta a la paz y estabilidad en Medio Oriente.
Contraste. A la izquierda, rescatistas trasladan a un herido tras la represión israelí de las protestas en la Franja de Gaza, en Palestina; a la derecha, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aplaude al lado de Ivanka, hija del presidente norteamericano Donald Trump, en la ceremonia de inauguración de la embajada de Estados Unidos en Jerusalén. (AGENCIAS)
