(Primera parte)
EL HIMNO DEL MEXICANO EN EL EXTRANJERO
Son las 18 horas con ocho minutos del martes 1° de mayo del 2018, mi estado de ánimo se encuentra por los cielos, pues es precisamente este día cuando orgullosamente arribo a los 76 años de edad, pletórico de optimismo y grandes proyectos para cada uno de los días que el Rey de Reyes, el Creador del Universo, me permita vivir durante este año; así nos lo hace saber el locutor de la Radio 106.7 FM de Gómez Palacio, Dgo., y da inicio el bloque de varias canciones, como es costumbre, y por enésima ocasión, vuelvo a escuchar esa bella, romántica y nostálgica melodía, inspirada composición titulada Canción Mixteca, en las inconfundibles voces de ese gran barítono, ese gran samurái de la canción, Don Pedro Vargas, haciendo dueto con el también inmortal Rey del Falsete, Miguel Aceves Mejía, y mis recuerdos vuelan en forma por demás vertiginosa a esa bella y colonial ciudad de Querétaro, Qro., Patrimonio Cultural de la Humanidad, y en especial a la dos veces centenaria Alameda "Miguel Hidalgo", lugar donde su compositor, el Prof. José López Alavés, en 1915, se inspiró para dar forma musical a tan hermosa melodía.
¿Cuántas veces he visitado esta alameda? He perdido la cuenta, ya que cada vez que estoy en esa bella ciudad muy de mañana, ya me encuentro en este lugar trotando, caminando, jamás corriendo, los 1200 metros que comprenden su alrededor ocho, diez y hasta doce veces; después, tranquilamente recorro sus andadores, admiro sus jardines y sus vetustos y frondosos árboles, su kiosko y hago un alto en mi andar para admirar tácitamente sus monumentos, la escultura central del Padre de la Patria, erigido en 1897, esas esculturas modernistas amorfas y de formas caprichosas, las majestuosas y elegantes entradas y sobre todo el conjunto monumental compuesto por una pareja: ella vestida elegantemente muy a la mexicana, él en traje casual con altas botas y guitarra a mano, en una placa al frente de ellas que dice:
EN 1915 ESTA LEGENDARIA Y TÍPICA ALAMEDA QUERETANA INSPIRA AL PROF. D. JOSÉ LÓPEZ ALAVÉS SU INMORTAL "CANCIÓN MIXTECA", ESENCIA DEL ROMANTICISMO Y PATRIMONIO MUSICAL DE LOS MEXICANOS. "QUE LEJOS ESTOY DEL SUELO DONDE HE NACIDO, INTENSA NOSTALGIA INVADE MI PENSAMIENTO, Y AL VERME TAN SOLO Y TRISTE CUAL HOJA AL VIENTO, QUISIERA LLORAR, QUISIERA MORIR DE SENTIMIENTO".
Sin embargo, otra versión (así suele suceder con frecuencia), escrita por Ramón Inclán publicada en El Oaxaqueño el 1° de marzo del 2008, menciona que esta canción la compuso su autor "en un humilde cuarto de la Casa del Estudiante, ubicada frente a la Plaza del Carmen en la Ciudad de México, que de acuerdo a su sentir, haberse encontrado entonces 'lejos del suelo' en el que había nacido, ausente de su terruño, alejado de sus seres queridos, de sus amigos y de todo aquello que conoció desde niño y que le causaba nostalgia y pena".
Tal sentimiento lo había plasmado originalmente en una pieza musical que compuso en 1912, misma que convirtió en Canción Mixteca cinco años más tarde, al acomodarle la letra con sentida expresión que no pocas veces ha hecho llorar a mexicanos en el exterior de su país.
En 1936, se incluyó en la histórica película ALLÁ EN EL RANCHO GRANDE, y a través de la misma obtuvo la consagración como tema musical que tiene carácter internacional.
Por: Dr. Leonel Rodríguez R.
