La jefa del gobierno alemán condenó el uso de armas químicas y dirigió palabras de respaldo a los aliados. (EFE)
La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, descartó hoy la participación militar en un eventual ataque contra Siria, como amenaza el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Alemania apoyaba posibles acciones de Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia pero no dio mayores precisiones al respecto. "Si los miembros permanentes del Consejo de Seguridad (de la ONU) dan pasos más allá de las medidas diplomáticas, entonces actuaremos en apoyo", indicó.
En conferencia de prensa conjunta con el primer ministro de Dinamarca, Lars Rasmussen, quien realizó una visita a este país, la jefa del gobierno alemán condenó el uso de armas químicas y dirigió palabras de respaldo a los aliados. "Vemos y apoyamos que se haga todo para sentar una señal de que el uso de armas químicas no es aceptable", afirmó.
Manifestó que ahora se debe tomar en consideración toda la gama de medidas, lo que para Alemania significa apoyar todas las actividades del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y del trabajo de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW) por sus siglas en inglés.
Enfatizó que en estos momentos "damos seguimiento a lo que escuchamos desde Estados Unidos y desde Francia".
Merkel hizo las declaraciones después de tener una conversación telefónica con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien dijo en un programa de la televisión gala de la emisora TF1 que tiene pruebas del uso de armas químicas por parte del gobierno sirio.
Tanto ella como Rasmussen se negaron a emitir una evaluación sobre la posibilidad de que se llegue a un choque directo de Estados Unidos contra Rusia, en el marco de las declaraciones del mandatario Trump contra ese país.
El presidente estadounidense escribió en Twitter: "Rusia juró que derribará todos los misiles que se lancen contra Siria. Prepárate Rusia, porque llegarán". Rusia protege a Siria y rechaza las acusaciones contra Damasco en el sentido de que usó armas químicas.
Por su parte, el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, declaró en Irlanda que ni Estados Unidos ni Francia han solicitado a Alemania que se sume a una eventual operación militar contra Siria.
Refirió que los países aliados occidentales no se deberían dividir. "Si se quiere mantener la presión sobre Rusia, los socios occidentales no deben separarse", estableció.
Algunos medios de prensa locales interpretaron las palabras del jefe de la diplomacia alemana como una alusión a la posibilidad de que el país apoyaría por lo menos en lo político un eventual golpe militar de los aliados.
Maas subrayó en varias ocasiones durante la conferencia de prensa en la que participó en Irlanda junto con su homólogo, Simon Coveney, que los aliados occidentales deben hablar con una sola voz. Hay antecedentes de que en el pasado no ha sido así.
Estimó que parte de la base de que los aliados consultarán a Alemania sobre un eventual ataque militar.
