La cultura en México
Vamos a tratar primero, de definir la palabra cultura, existen muchos conceptos, sobre lo que significa esta palabra. El término Cultura, que proviene del latín cultus, hace referencia al cultivo del espíritu humano y de las facultades intelectuales del hombre.
La Cultura, es el eje transversal de toda transformación revolucionaria. Un pueblo sin cultura, solamente podrá aspirar a lo material, es decir, a poseer riqueza, tener la casa más elegante y cara, último modelo de carro, etc.
La nueva clase media, olvida pronto a quien posibilitó su asenso, estrella semanal del supermercado, la competencia empieza a ser la ideología de la clase media. El vestido de marca se transforma en piel, el centro comercial, la nueva iglesia, el cliente su esclavo fiel, la honradez, la lealtad, la solidaridad, son lobos esteparios arruinados, el pueblo gordo de avaricia. Tambaleándose en la nueva realidad, no sabe qué hacer con lo que tiene, le han caído del cielo, los hospitales, las universidades, las carreteras, el trabajo, el sueldo mensual, las pensiones, ahora sí puede presumir, ahora sí puede insultar, solazarse, manifestar su ego escondido, ahora nadie lo ningunea, puede dilapidar, enseñorearse, pervertirse porque es su derecho, el Estado vigila y propone su derecho.
Se le entregó el pez, sin enseñarle a pescar. Analfabeto de principios y de símbolos, su egoísmo, su individualidad, su mediocridad, su ambición están garantizados.
Lo primero que define y permite una transformación, es la Cultura y la cultura es la percepción que tenemos del mundo. La forma en la que accedemos al otro, la posibilidad de llenar el espíritu de una sensibilidad bondadosa, es la fuente de nuestro comportamiento, el aprendizaje diario de la generosidad y el respeto al otro.
En la Televisión, denigrantes estereotipos de nosotros mismos, con novelas, series de artistas, talksshows. En el Cine, la manera más sofisticada de traficar, asesinar, robar, con películas de narcos, de policías. En la Política, falsos profetas, burdos ladrones, políticos que medran con la pobreza, etc.
En la Administración Pública, presdigitadores del hurto, con fraudes, robos descarados, empresas fantasma. En la Escuela, el implacable ejemplo de las drogas, embarazos de adolescentes, el ausentismo, la deserción, etc.
En la Familia, la violencia, el alcohol, el divorcio. La Grosería, el trato burdo, el insulto brutal. Amores eternos, que terminan en la comisaría o suicidios. Deseos de que a nuestros hermanos, los azote otro terremoto, por no pensar o actuar, como uno.
Por eso, hay que llegar al pueblo, con humildad. Por eso hay que tocar sus resortes guardados, para que salte su sensibilidad. Por eso hay que llenarlo de Poesía, música, Literatura, teatro y de la sabiduría y el ejemplo de los hombres y mujeres, que constuyeron la Patria.
Por eso hay que poner en sus manos, el arte, la ética, la estética. Porque.... si para algo sirve la cultura, es justamente para eso, para sensibilizarnos, para hacernos más comprensivos e incluyentes.
Profr. Emilio Nafarrate Parra.
Torreón Coahuila.
