LaMarcus Aldridge, de los Spurs de San Antonio, intenta anotar frente a Luc Mhah, de los Rockets de Houston. (EFE)
San Antonio se aprovechó de unos Rockets que reconocieron estar algo desconcentrados tras asegurarse de terminar la campaña con la mejor foja de la Conferencia del Oeste. Y con una victoria, los Spurs mejoraron su situación de cara a la postemporada.
LaMarcus Aldridge totalizó 23 puntos y 14 rebotes ayer, en un encuentro en San Antonio arrolló 100-83 a Houston tras limitarlo a su peor producción ofensiva de la campaña.
Así, los Rockets vieron cortada una racha de 11 triunfos consecutivos.
"Hemos tenido algunos altibajos en esta temporada, pero estamos mejorando en el momento adecuado", comentó Rudy Gay, quien terminó con 21 puntos. "No hay mejor momento que éste para lograrlo. Éste es el momento en que los equipos mejoran o se vienen abajo".
Los Spurs permanecieron en el cuarto sitio de la Conferencia del Oeste y evitaron la barrida en la campaña ante los Rockets, que ostentan la mejor foja de la NBA.
Houston pareció muy relajado tras asegurar el primer sitio del Oeste el jueves, a raíz de la derrota de Golden State ante Milwaukee.
"Los Spurs jugaron 10 veces mejor que nosotros", reconoció el entrenador de los Rockets, Mike D'Antoni. "Lucieron como un equipo que trata de ocupar un buen lugar en los playoffs. Nosotros nos vimos como un equipo que obtuvo ya eso. Si volvemos a jugar así el martes, nos volverán a patear el trasero".
Los Rockets jugaron sin el lesionado Chris Paul.
