"Los sacerdotes comos ciudadanos comunes y corrientes, no podemos tener beneficios o privilegios que otros ciudadanos no tienen", dijo el obispo de Torreón, Luis Martín Barraza, en relación a la primera sentencia que se da en contra de un cura acusado de pederasta.
Ayer, el juzgado 55 en materia penal de la Ciudad de México, informó una sentencia de 63 años de cárcel contra el sacerdote Carlos López Valdés, al ser culpable del delito de violación contra un niño de 12 años, cuando éste era monaguillo en una iglesia de Tlalpan.
"Que sea pues justa la sentencia, estamos en manos de la ley, también no tienen por qué pedir permiso a la Iglesia para proceder. Estamos en las manos de la ley" dijo.
Por otra parte, comentó que podría la Diócesis de Torreón emprender una investigación en torno al caso de dos sacerdotes acusados por el mismo delito, siempre y cuando se presente una denuncia con las evidencias correspondientes.
Hasta el momento ni la autoridad ni la Santa Sede ha informado a la Diócesis sobre la investigación.
"Yo no los conozco y me extrañaba porque se hablaba de una observación que se haría desde la Santa Sede, que no nos hubieran informado de algo. No tengo datos de esos casos en concreto".
Habló en relación a la primera sentencia que se da en contra de un cura acusado de pederasta. (EL SIGLO DE TORREÓN)