Impulsos. Los comités y ejecutivos experimentan el impacto de los ciberataques, las compañías recurrirán a políticas de seguro cibernético. (ARCHIVO)
A medida que los ataques cibernéticos amenazan cada área de negocios y crecen en volumen y frecuencia, las empresas se verán forzadas a tomar nuevas prácticas para administrar el riesgo de ciberseguridad, integrándolas de forma relevante en su gestión empresarial.
De acuerdo con el informe de Predicciones de Ciberseguridad 2018, dado a conocer por la empresa Aon, para este año se anticipa una mayor exposición cibernética, debido a la convergencia de tres tendencias: la creciente dependencia de las empresas en la tecnología; el enfoque intensificado de los reguladores en la protección de datos de los consumidores y el aumento del valor de los activos no físicos.
De ahí que deben adoptar un enfoque coordinado e impulsado por la primera línea gerencial de la compañía para la gestión de riesgos cibernéticos, permitiéndoles evaluar mejor y mitigar el riesgo en todas las funciones empresariales, expuso la firma de ciberseguridad.
Informó en un comunicado que entre los puntos destacados del informe están que a medida que los comités y ejecutivos experimentan el impacto de los ciberataques, las compañías recurrirán a políticas de seguro cibernético.
Además de que este año se espera que los responsables de riesgos trabajen en colaboración con los jefes de seguridad de la información, para ayudar a las organizaciones a comprender el impacto total del riesgo digital en el negocio.
Asimismo, en 2018 los reguladores a nivel internacional, nacional y local aplicarán de manera estricta las regulaciones de ciberseguridad existentes y aumentarán las presiones de cumplimiento sobre las compañías al introducir nuevas plataformas y tecnologías.
El reporte también mostró que más allá de las contraseñas, las empresas deberán implementar nuevos métodos de autenticación, desde reconocimiento facial, hasta huellas digitales, aunque estas tecnologías aún son vulnerables.
Señaló que las compañías más allá de los sectores de servicios de tecnología, gobierno, automotrices y servicios financieros introducirán plataformas de bonificación de errores en sus programas de seguridad.
Subrayó que el informe también predicen que los atacantes que utilizan formas de malware benigno (como software diseñado para provocar ataques de DDoS -ataque de denegación de servicio- o lanzar anuncios en miles de sistemas) lanzarán enormes brotes de ransomware.
Por todo lo anterior, las empresas deberán tomas acciones específicas para abordar las amenazas cibernéticas y otras tendencias que se anticipan este año.
