El subsecretario de Gobierno en La Laguna de Durango, Manuel Ramos Carrillo, dijo que las autoridades sólo hicieron valer la ley porque los manifestantes contra la planta de cianuro de sodio fueron quienes hicieron las agresiones; refirió que ya se despejaron las vías de comunicación y que se establecerá vigilancia permanente para evitar nuevos conflictos.
Ramos Carrillo dijo que desde la madrugada de este viernes, los inconformes cerraron la carretera a Dinamita y por la mañana impidieron que vehículos y trabajadores entraran y salieran de empresas ubicadas en ese sector de Gómez Palacio, como la fábrica de carbonato de calcio Reverté, Austin Bacis, las naves agrícolas de Pilgrims y Chemours, cuya planta de cianuro de sodio está en proceso de construcción.
Detalló que cuando llegaron al lugar para dialogar, los manifestantes los recibieron lanzándoles piedras y palos, y empezaron a agredir a los policías que ahí se encontraban para mantener el orden; aseguró que del interior de algunas viviendas, los inconformes detonaron armas de fuego y que no fueron los uniformados, pues los antimotines atienden estas situaciones desarmados.
El subsecretario de Gobierno dijo que se trata de grupos de choque que pertenecen a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y provenientes de otras regiones del país, pues incluso los pobladores no los conocen.
Señaló que poco después de la una y media de la tarde se logró despejar las vías de comunicación y los accesos a las empresas.
Detalló que cuando llegaron al lugar para dialogar, los manifestantes los recibieron lanzándoles piedras y palos, y empezaron a agredir a los policías que ahí se encontraban para mantener el orden. (EL SIGLO DE TORREÓN)
