El proceso comenzó a las 9 de la mañana de hoy y se tiene previsto su término a las 5 de la tarde. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Los señalamientos, descalificaciones y protestas no detuvieron el proceso para renovar la dirigencia de la Unión Sindical de Empleados de La Laguna (UNE), para el periodo 2018-2020, a la que están agremiados más de 500 empleados del Simas, Cimaco y Parisim.
El proceso comenzó a las 9 de la mañana de hoy y se tiene previsto su término a las 5 de la tarde. La boleta contiene los tres nombres de las planillas (verde, anaranjada y blanca), que desde hace más de 15 días entraron en pugna por el proceso; las dos últimas argumentaron que no les permitían participar e incluso realizaron una protesta en la Junta de Conciliación y Arbitraje, a quien acusaron de bloquear su participación.
Los representantes de las planillas blanca y anaranjada no estuvieron presentes en la apertura de las urnas y hasta el mediodía no se habían presentado a pesar de que ya se contabilizaban 40 votos.
Representantes de la planilla verde dijeron que las planillas sí pueden participar aunque no cumplan con los requisitos marcados.
“Nunca comentamos que iban a quedar anuladas, hicimos el comentario en los escritos que no eran aptas para competir, pero tal es el caso que hoy día las boletas de elección vienen foliadas y con las planillas y en la apertura les dimos un tiempo de 20 minutos bajo notario para que se presentaran y pasar lista, a lo cual sus representantes no asistieron”.
“El conflicto es que ellos se dieron por anulados. Nosotros les dimos 20 minutos para subsanar su error lo que nunca hicieron, no les dio capacidad para tratar de subsanar ese error, lo que hicieron fue cerrar las instalaciones de la junta”, señaló César Alejandro Aguilar Fernández, quien encabeza la planilla verde junto con Jorge Raúl Rodríguez, ambos parientes del exregidor del PRI, Mario Cepeda.
La planilla anaranjada y la blanca denunciaron que los dos representantes fueron dados de baja del Simas por lo que no pueden participar en el proceso, sin embargo éstos argumentan que sus derechos sindicales están a salvo aunque los den de baja en el Simas, pues así lo marcan los estatutos.
Además señalan que hasta el momento no han sido notificados por escrito sobre la baja.
Ayer viernes trabajadores adheridos a la UNE tomaron la Junta de Conciliación y Arbitraje y acusaron de "corrupto" a Javier Armendáriz Reyes Retana, a quien acusaron de apoyar a la "Planilla Verde" y pidieron que se suspendieran las votaciones, pero no lo lograron.