¿Un día sin amor?

Estamos acostumbrados a celebrar el 14 de febrero de cada año dándole por nombre “Día de los Enamorados” o “San Valentín”, pero… ¿qué es el amor?

El amor es un sentimiento de afecto universal y es uno de los valores más importantes. Es una fuerza que nos impulsa hacer lo que nunca imaginamos hacer, por ello es considerado un sentimiento moral que puede lograr que actúes de forma distinta, sobre todo durante el “encantamiento” inicial. El amor puede hacerte feliz, y quizá hasta puede cambiar tu manera de percibir la vida, pero también puede actuar de forma contraria. Qué pasa entonces cuando no tenemos el amor que esperamos.

La perfecta ilusión

Las relaciones interpersonales que vamos formando tienen una función enriquecedora, por naturaleza, buscamos individuos que lleguen a “sumar”.

Pero el amor es mera química y tiene efectos equiparables a los de algunas drogas, por lo tanto al momento de experimentar sus efectos, difícilmente se tiene un panorama claro.

“Idealizamos tanto el amor que no llegamos a gestionar, ya que lo ponemos como algo perfecto y al momento de sentirlo encontramos derivadas que se oponen” recalca la psicóloga Irene Diaz.

Pero cuando el amor termina, el Colegio de Medicina Albert Einstein afirma que los efectos secundarios o la abstinencia a esas sustancias son tan fuertes que comúnmente desembocan en una conducta depresiva y hasta obsesiva.

El riesgo de la dependencia

La dependencia emocional se define como una vinculación insana basada en el dolor, la rabia y el miedo, en un ambiente abusivo, posesivo e inaccesible, según la autora Dorothy May en su libro “Codependencia: la dependencia controladora; la dependencia sumisa”.

El desequilibrio y la desigualdad son algunas de las características más destacadas en estas relaciones y la compañía se convierte en lo más importante, más que el amor.

La dependencia emocional está calificado como un desorden psicológico, sin embargo, para aquellas personas a las que les atemoriza el quedarse “solas”, es un peligro latente.

Los primeros signos de una dependencia de acuerdo al psicólogo Jorge Castelló Blasco pueden ser el acoso constante, la idealización exagerada de la pareja, la sumisión, el pánico al abandono o rechazo, la baja autoestima y el miedo irracional a la soledad.

Tú eres la prioridad

Aunque pueda llegar a sonar trillado e incluso con tintes narcisistas, tú eres la prioridad.

Somos el resultado de un constante crecimiento, de evolución, de la educación que recibimos, de las experiencias, y en conjunto estos factores conforman nuestra personalidad y concepción del mundo.

Estos factores también son decisivos para formar nuestro carácter, una característica primordial de la personalidad y que responde directamente a la forma en la que enfrentamos las situaciones difíciles; estas incluyen también el plano amoroso.

Las relaciones son una inversión de tiempo, de esfuerzo y de emociones. Las expectativas y la propia química, la cual tratábamos en un inicio, juegan un papel importante.

Pero qué sucede cuando no aplicamos lo mismo con nosotros mismos, cómo enfrentamos las desilusiones si nosotros vivimos constantemente pensando que somos parte del problema.

En un artículo del periódico Huffington Post titulado “¿Por qué es importante amarte a ti mismo antes que a nadie?”, la autora aborda el tema desde la perspectiva de aquellos individuos que se sienten plenos pero sin una relación amorosa.

“Me dí cuenta que prefería cuidar de mí antes que de otra persona. Quería amarme y hacer cosas por mi salud mental, emocional y espiritual, antes de poder compartirlas con otra persona”, relata la autora Emily Stroia.

Y no solo es una perspectiva, investigaciones afirman que entre más amor propio se experimenta, mayor satisfacción se tiene en la vida. El amor propio también es un detonante para alcanzar propósitos personales, en especial los relacionados a la salud.

En una ocasión el New York Times dio a conocer un estudio que sugería que aquellas personas que experimentaban la autocompasión, tenían un menor riesgo de desarrollar depresión o ansiedad.

Asimismo es un impulso para dejar la procastinación de lado y sobre todo es un impulso contra las adversidades; esto según el Psychological Science Journal.

No te dejes llevar

El catorce de febrero puede ser un recordatorio tanto de situaciones positivas y negativas relacionadas al amor, pero no debes dejarte llevar.

“Esta es una fecha solamente simbólica, donde no existe ningun vínculo con nuestra salud emocional” asintió la psicóloga. Para llevar una vida mas sana debemos de realizar un autoconocimiento para saber que es lo que sentimos, que es lo que nos hace cambiar, esto es para ir conociendo nuestras reacciones y conductas ante diversas situaciones. Estar bien con uno mismo es señal de tener una alta autoestima,desarrollar la capacidad de aceptarnos, aprobarnos y querernos.

“La autoagresión es la primera alerta de daño físico y emocional de alguien llevándolo a una situación de suicidio” afirmó la psicóloga Irene Díaz.

El amor es un sentimiento que se vive todos los días, las 24 horas del día y lo puedes recibir de muchos lados; en casa con tu familia, con tus amigos en la escuela o laboralmente. Una pareja llega a su momento y mientras tanto la especialista Irene Roja recomienda el autoconocimiento. “Para realzar tu felicidad y dicha, tú eres para alguien y alguien es para ti”, recalca.