Un día después de su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso, el presidente de Estados Unidos Donald Trump volvió a la riña con el Buró Federal de Investigaciones. (EFE)
Un día después de su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso, el presidente de Estados Unidos Donald Trump volvió a la riña con el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) por la investigación sobre los supuestos lazos con Rusia de su equipo de campaña.
La polémica tomó esta vez la forma de una abierta disputa entre la Casa Blanca y el FBI, debido a los planes de Trump de hacer público un informe que detalla supuestos abusos del Departamento de Justicia en su investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones de 2016.
El FBI expresó en un comunicado "preocupaciones serias" sobre los planes de la Casa Blanca de permitir la publicación del informe, y alertó de que contiene algunas "omisiones de hechos materiales" que podrían comprometer su "exactitud".
Esa declaración dejó clara la brecha entre la Casa Blanca y el FBI respecto al informe, que según la oposición demócrata podría dar una excusa a Trump para despedir al "número dos" del Departamento de Justicia, Rod Rosenstein, e incluso al fiscal especial que investiga la trama rusa, Robert Mueller.
El Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de EU votó el lunes a favor de hacer público el informe y dio a la Casa Blanca cinco días para decidir si permitía o rechazaba su publicación, un plazo que concluye el sábado.