Granit Xhaka (i) celebra luego de anotar el segundo gol del Arsenal. (AP)
Arsenal se impuso ayer al Chelsea 2-1 y logró el último boleto para la final de la Copa de la Liga, donde se verá las caras con el Manchester City.
Los 'Gunners' de Arsene Wenger remontaron el tanto inicial de Eden Hazard y, con goles Nacho Monreal y Granit Xhaka, le dieron la vuelta al partido.
Avisaron los 'Blues' a los 4 minutos con un gol de Pedro que fue anulado por fuera de juego, pero, sólo tres minutos más tarde, Hazard recibió un pase entre líneas de Pedro y definió con la zurda ante la salida de Ospina.
La reacción del Arsenal no tardó en llegar, y pasados los primeros diez minutos subió las tablas al marcador gracias a Monreal, que tuvo de su lado la suerte y la inestimable colaboración de Rüdiger y Alonso.
El internacional español vio portería con un afortunado tanto de cabeza en un balón que tocó primero en Alonso y luego en Rüdiger para alojarse en el fondo de la portería.
Ya en la segunda mitad, Xhaka fue el encargado de culminar la remontada de los suyos, con otro gol con una pizca de fortuna, puesto que el balón que peleó Lacazette en el área con Rüdiger tocó en el defensa alemán y le cayó al centrocampista helvético, que se adelantó a la defensa y a Caballero y metió la puntera para alojar la redonda en el fondo de las mallas.
Conte dio entonces entrada a un delantero -Batshuayi- en lugar de Pedro, pero, pese a la insistencia ofensiva, el Chelsea no encontró el tanto que hubiera forzado la prórroga y murió en la orilla ante un Arsenal que ve la Copa de la Liga como la tabla de salvación de una campaña que, de momento, es más que decepcionante.
Los 'Gunners', que podrían ganar su primera EFL Cup -ahora Carabao Cup por motivos de patrocinio- con Wenger, se llevaron así el triunfo y la clasificación para la final del próximo 25 de febrero en Wembley, donde ya les espera el Manchester City, que hizo los deberes el martes.
