El último día del año está lleno de celebraciones que suelen acompañarse de un vino, de una cerveza o de cualquier otra bebida alcohólica que de consumirse en exceso, puede acarrear una intoxicación, comúnmente conocida como "cruda o resaca".
El doctor Luis del Moral Rossete, dice que cuando se ingieren cantidades importantes de alcohol "hay deshidratación en el organismo y una de esas partes del organismo es en la nemesis a nivel cerebral, lo que explica en gran parte el dolor de cabeza que se presenta en la resaca, al igual que la debilidad y las pocas ganas de trabajar", expuso. La recomendación para este fin de año, es beber con moderación y nunca ingerir alcohol con el estómago vacío.