Descuido. Los juegos infantiles no reciben el mantenimiento adecuado y presentan a su alrededor riesgos como varas y escombros. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Prácticamente en el abandono se encuentra el Metroparque en el río Nazas, una de las "obras emblema" de la administración municipal saliente en Torreón.
Áreas verdes decadencia y juegos infantiles sin mantenimiento son sólo parte de lo evidente, otros puntos representan auténticos riesgos para los visitantes, principalmente los menores de edad.
Precisamente la reducción de áreas de riesgo era una de las prioridades de la obra que costó más de 10 millones de pesos en Fondos Metropolitanos.
Para tal efecto, se colocaron dos lineas de semáforos peatonales que detienen el tráfico en favor de los peatones, esto sobre el bulevar Río Nazas.
Sin embargo, desde hace más de un año los aparatos simplemente se apagaron, obligando a los colonos de los alrededores a correr entre los vehículos que circulan a exceso de velocidad.
Cabe recordar que poco después de su inauguración, en 2015, una menor fue arrollada en ese mismo punto cuando corría hacia el Metroparque, los vecinos afirman que desde entonces han contabilizado al menos otros cuatro accidentes similares, aunque ninguno de fatales consecuencias.
Debido a disposiciones federales, en el lecho del río Nazas no pueden ser colocadas estructuras fijas, sin embargo, gran parte de los juegos infantiles que se instalaron en el sitio carecen de estabilidad, incluso se han despegado del suelo o simplemente faltan piezas como los techos.
Otras atracciones se han despegado por completo del suelo y se observan sueltas, tal fue el caso de un tunel de aluminio cerca de las rampas laterales.
Aunado a las carencias antes mencionadas está el hecho de que una empresa constructora bloquea el paso a los visitantes desde el propio río Nazas, lo que los obliga a correr sobre el bulevar ocupado por los vehículos veloces.
