Debate. Los candidatos a la presidencia de Chile, Sebastián Piñera y Alejandro Guillier, aprovecharon el último cara a cara electoral rumbo a los comicios del próximo domingo. (AP)
Sebastián Piñera pregonó que su experiencia en el poder lo ayudaría a conducir a Chile en el próximo cuatrienio. Su rival oficialista Alejandro Guillier ofreció profundizar reformas sociales de su correligionaria Michelle Bachelet.
En el último debate televisado con miras a la decisiva segunda vuelta presidencial chilena del domingo, el derechista Piñera y el centroizquierdista Guillier insistieron en resaltar sus propuestas de campaña y sus respectivas capacidades ante un fragmentado y apático electorado. Los resultados de la primera vuelta de noviembre echó por tierras las proyecciones de las encuestas y registró un abstencionismo cercano al 50%.
Si Piñera logra imponerse el domingo al candidato de la facción de la presidenta socialista Bachelet, Chile seguirá a otros países de la región _como Argentina y Perú_ que giraron a la derecha política.
"No hay mejor escuela para ser un buen presidente que haber sido presidente", destacó Piñera durante el foro que se extendió hasta la madrugada del martes y fue visto por el 43% de los chilenos, según los organizadores de la asociación de canales de televisión. "Tengo la experiencia que (el senador) Alejandro no tiene".
"Tenemos que elegir entre dos caminos. Los invito a elegir el que no conduce al paraíso, pero sí a tiempos mejores para todos", agregó Piñera, quien incluso varió su planteamiento en asuntos como la administración de pensiones.
El exmandatario sorprendió al respecto al decir que no descartaría crear una administradora estatal de fondos de jubilaciones para introducir competencia en ese mercado, que entrega pensiones muy bajas. Él siempre propugnó por introducir mayor competencia en ese ramo, pero jamás había aceptado crear un ente estatal para manejar tales fondos.
Guillier, por su parte, dudó de los planteamientos de Piñera, al tiempo en que se comprometió a mejorar las pensiones de los más desposeídos y que el transporte público sea gratis para los adultos mayores. "A profundizar --aseguró-- las reformas", que atribuye a la actual mandataria.
"Es hábil en los negocios, eso no se puede negar", dijo el abanderado oficialista sobre su contrincante. Pero "él ya fue presidente de Chile y no hizo las cosas que ahora anuncia".
Ambos coincidieron en algunos asuntos, como la necesidad de romper el monopolio de los laboratorios farmacéuticos, aunque ello implique importar remedios del extranjero. En Chile, los medicamentos son demasiados onerosos y algunos cuestan hasta un 3.000% más que en otros países de la región, según expertos.
Los analistas consideraron que ambos candidatos también buscaron atraer a segmentos del electorado que consideran potenciales, particularmente de centro. Piñera, especialmente, busco lanzar un guiño al electorado de centro. El exmandatario de 68 años _que sacó un 36,6% de sufragios en primera vuelta en noviembre y que cuenta con el apoyo de un excandidato ultraconservador_ rondaría poco más del 40%, según expertos.
"Piñera puede crecer en votos hacia el centro", señaló el analista Marcelo Mella, de la Universidad de Santiago de Chile.
Guillier _con un 22% en noviembre_ necesita al menos otro 20% de sufragios para tener posibilidades de ganar y su cantera de votos sería el Frente Amplio (FA), un movimiento nuevo de 14 pequeños partidos y agrupaciones sociales que conquistaron un apoyo de 20% en noviembre y que han calificado de ambiguo su programa.
Algunos dirigentes del FA aseguran que votarán por él, aunque no han llamado a sus adherentes a hacer lo mismo.
Mella consideró, empero, que Guillier no puede "llevar su discurso más a la izquierda, más hacia el Frente Amplio", a fin de que no espante al centro del espectro político.
En Chile está prohibido realizar encuestas dos semanas antes de las elecciones. El último sondeo divulgado por el Centro de Estudios Públicos se publicó a mediados de octubre _antes de la primera vuelta del 19 de noviembre. Éste pronosticó que Piñera obtendría un 44,4% de sufragios, seguido de Guillier con un 19,7% y Beatriz Sánchez _la candidata del FA_ un 8,5%. Sin embargo, Piñera sacó menos y la abanderada del FA sorprendió con su 20%. Otras encuestas locales también se equivocaron en sus pronósticos.
