Derechos humanos. La violencia de género es una de las violaciones que se presenta con mayor frecuencia en Coahuila.
La violencia de género, la tortura, la represión en la libertad de expresión, la desaparición forzada, son hechos que se presentan todavía en México, en Coahuila, en Durango, en la Región Lagunera, y que violentan los derechos humanos.
Y aunque la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) señala que el Estado debe proveer las condiciones más óptimas de disfrute de los derechos y no disminuir ese nivel logrado, es precisamente la autoridad la que suele cometer los abusos en contra del ciudadano, que muchas veces no lo denuncia por falta de confianza o porque simplemente desconoce que se están violando sus derechos.
MAYOR CONSCIENCIA
Los derechos humanos fueron reconocidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hace casi 70 años y representan un punto clave en la evolución de la humanidad, pues en la medida en que se reconozca el valor de cada persona es que se puede avanzar en las problemáticas, consideró Miguel Valdés Villarreal, activista de Laguneros por la Paz.
"Tenemos, por ejemplo, personas desaparecidas, personas asesinadas, es verdaderamente dramático que en estas fechas sigan sucediendo estas cosas, hay muchas limitaciones a los derechos de las personas, en algunos trabajos se imponen horarios y condiciones que no son favorables para los trabajadores, las mujeres reciben menos ingreso, son serias deficiencias que tenemos", manifestó.
Admitió que hay un avance en el reconocimiento de la dignidad de cada persona, pues consideró que hay una mayor conciencia de la sociedad sobre sus derechos humanos, sin embargo, indicó que el reto es grande.
"En México vivimos un momento negro en cuanto a la libertad de expresión y la violencia, pero a pesar de esta oscuridad tenemos que organizarnos como sociedad, de ponernos de acuerdo para lograr que cada persona tenga una vida digna", expresó.
SIN MECANISMOS
Roberto Giacomán Gidi, responsable del programa de Derechos Humanos y el programa de Educación para la Paz en la Universidad Iberoamericana, dijo que en los gobiernos locales falta una cultura de los derechos humanos, pues desconocen cuáles son y así no los pueden garantizar en el ejercicio de sus funciones.
Recordó que en 2011 se llevó a cabo una reforma importante para traducir en el sistema jurídico mexicano la conceptualización de los derechos humanos, en términos de normas, pero falta mucha capacitación y aprendizaje para que sepan cómo trabajar respetándolos.
"Es un ejercicio que va a requerir tiempo para capacitar tanto al Poder Judicial como al Ejecutivo y el Legislativo", indicó.
Señaló que en la región Lagunera han destacado problemáticas graves de tortura, de desapariciones forzadas, de uso de la violencia por parte de los cuerpos policiacos, y la violencia de género, que se presenta en todos los niveles.
Giacomán dijo que hay mucho por hacer en muchos ámbitos, pues aunque en ocasiones pareciera haber avances, luego se observan retrocesos en el tema y el problema continúa.
Consideró que hay una cultura de apropiación del lenguaje de los derechos pero siguen faltando los mecanismos adecuados para hacerlos valer, por lo que persiste el serio problema en la administración de justicia, los tribunales, en las obligaciones de los funcionarios y los agentes estatales.
"Hemos avanzado en el discurso, en el conocimiento de la gente sobre los derechos humanos, pero seguimos en el camino de trabajar por su implementación y su transformación real", dijo, "faltan mecanismos para la observancia y para la vigilancia del cumplimiento de éstos".
EN CRISIS
Jorge Saucedo Alvarado, activista del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, consideró que el problema más grave en México es la impunidad, pues de ahí se derivan la corrupción, la violencia y otras violaciones graves a los derechos.
"A nivel nacional hay muchos casos que se han vuelto emblemáticos como Ayotzinapa, Tlatlaya Atenco, los miles de desaparecidos, las miles de personas que han sido ejecutadas arbitrariamente, la Ley de Seguridad Interior que se discute actualmente, donde militarizar el país no es la solución", manifestó.
Señaló que hay gran desconocimiento de las personas respecto a sus derechos, pues es un saber empírico y esto les lleva a alejarse de la Ley, lo que provoca que la autoridad la aplique a su libre criterio.
Consideró que México ha tratado de mejorar su imagen en este sexenio, por lo que incluso permitió la visita de la Corte Interamericana, sin embargo, el discurso les falló cuando se desapareció a los normalistas de Ayotzinapa, lo que evidenció una grave crisis de derechos humanos en el país.
"¿Cuántos no tenemos amigos, familiares, que fueron secuestrados, que han desaparecido? Alguna arbitrariedad por parte de las policías municipales o estatales", expresó, "aquí en la región hay problemas graves como la desaparición forzada, los campos de exterminio que se han encontrado en las distintas zonas, los abusos a los migrantes y el derecho ambiental".
Saucedo dijo que, aunque la autoridad tendría que ser el garante de los derechos humanos, es precisamente quien termina por violentarlos y cometer los abusos y arbitrariedades, la corrupción, la burocracia.
En este sentido, consideró que la ciudadanía debe informarse e impulsar una cultura de la denuncia.
HAY QUE DENUNCIAR
En la Comarca Lagunera, las policías concentran el grueso de las denuncias en términos de los derechos humanos, principalmente Fuerza Coahuila, la policía investigadora y los municipales, por detenciones arbitrarias y allanamiento, explicó Jesús Alberto Rodríguez Cantú, segundo visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila (CDHEC).
"Hemos tenido un importante número de quejas que refieren que el grupo policial entra al domicilio y detienen a las personas sin tener una orden de cateo o de aprehensión", comentó.
En este sentido, se han emitido recomendaciones, de las cuáles, se tiene entre un 50 a 75 por ciento de cumplimiento.
"Es prioridad para nosotros que las autoridades tengan mayor interés en cumplir con las recomendaciones, el objetivo es reparar lo sucedido y que no vuelva a suceder para casos futuros, que la actuación de la autoridad sea la adecuada", expresó.
En México, a partir de 1992 se cuenta con organismos protectores de los derechos humanos a nivel nacional y en los estados. En estos 25 años, se ha buscado la difusión de los derechos de los grupos vulnerables, como son los niños, las personas con discapacidad, adultos mayores, mujeres y personas con VIH.
Señaló que la educación cívica es primordial para que, tanto las autoridades como los ciudadanos, estén conscientes de los derechos humanos y los hagan valer.
"Las autoridades también son seres humanos y sus actuaciones como autoridad van a ser las adecuadas si tienen la formación correcta", comentó el segundo visitador de la CDHEC, "contar con educación cívica completa en los primeros años de la vida es fundamental".
Señaló que la Comarca Lagunera cuenta con una buena cultura de la denuncia y se encuentra dentro del rango per cápita de quejas. Sin embargo, admitió que es la región que abarca el mayor número de quejas a nivel estatal.
En los últimos 15 días, se recibieron 45 quejas en la oficina de Torreón. El promedio mensual es de 30 quejas, que son aproximadamente el 30 por ciento de lo que se recibe todo el estado de Coahuila.
"Falta mucho por hacer, en capacitación, para que las autoridades tengan la consciencia de actuar adecuadamente, porque muchas veces sus actuaciones, intencionalmente, se hacen de manera irregular, es decir, si nosotros tenemos el ejemplo del allanamiento, el hecho de entrar a un domicilio es una irregularidad intencional, ya la autoridad sabe que no debe entrar sin una orden", expuso Rodríguez Cantú.
"El ser consciente de actuar adecuadamente es lo primordial en la actualidad, porque se cometen irregularidades sabiendo que se está actuando mal, es un punto que se debe atender inmediatamente", añadió.
Volver a lo básico
Los Derechos Humanos son el conjunto de prerrogativas sustentadas en la dignidad humana, cuya realización efectiva resulta indispensable para el desarrollo integral de la persona. Este conjunto de prerrogativas se encuentra establecido dentro del orden jurídico nacional, en la Constitución Política, tratados internacionales y las leyes.
La CNDH señala que el respeto hacia los derechos humanos de cada persona es un deber de todos. Todas las autoridades en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos consignados en favor del individuo.
De igual manera, la aplicación de los derechos humanos a la que se encuentran obligadas todas las autoridades se rige por los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad.
En este sentido, el poder público debe hacer todo lo necesario para que sean superadas la desigualdad, la pobreza y la discriminación.
La promoción, respeto, protección y garantía de los Derechos Humanos tiene la función de contribuir al desarrollo integral de la persona; buscar que todas las personas gocen de una esfera de autonomía donde les sea posible trazar un plan de vida digna que pueda ser desarrollado, protegidas de los abusos de autoridades, servidores públicos y de los mismos particulares.
Representa límites a las actuaciones de todos los servidores públicos, sin importar su nivel jerárquico o institución gubernamental, sea Federal, Estatal o Municipal, siempre con el fin de prevenir los abusos de poder, negligencia o simple desconocimiento de la función.
Crear condiciones suficientes que permitan a todas las personas tomar parte activa en el manejo de los asuntos públicos y en la adopción de las decisiones comunitarias (vida democrática).
Violaciones
Entre 2015 y 2016, los Organismos Públicos de Derechos Humanos registraron 16 mil 821 violaciones relacionadas con el derecho a no sufrir tortura, tratos crueles, inhumanos o degradantes, transgrediendo el Artículo 5 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Durante 2016, emitieron mil 774 recomendaciones dirigidas a las autoridades responsables de violar los derechos humanos.
Al 31 de diciembre de ese año, 24.3% de las recomendaciones habían sido cumplidas en su totalidad, 29.1% atendidas parcialmente, 31.8% aceptadas, pero sin contar con pruebas de cumplimiento, 10.7% fueron rechazadas, y 4.1% estaban pendientes de respuesta.
Las mujeres representan más de la mitad de las víctimas de violaciones a los derechos sexuales y reproductivos (79%), al derecho a la educación y derechos culturales (58.5%) y a los derechos laborales y a la seguridad social (50.4%).
Derechos
Los derechos consagrados en la Declaración Universal:
-Derecho a no sufrir tortura, tratos crueles, inhumanos o degradantes.
-A una personalidad jurídica.
-A no ser detenido arbitrariamente.
-Al debido proceso y a las garantías judiciales.
-A la presunción de inocencia, a la exacta aplicación de la ley.
-A la privacidad.
-A la libertad de circulación y residencia.
-A la familia y al matrimonio con pleno consentimiento.
-A la propiedad.
-Libertad de pensamiento, conciencia y religión.
-Libertad de opinión y expresión.
-Libertad de reunión y asociación.
-Derechos políticos.
-Derecho a la seguridad social.
-Derechos laborales y sindicales
-Al descanso y a la limitación de la jornada de trabajo y vacaciones pagadas.
-A un nivel de vida adecuado, alimentación y vivienda.
-A la educación.
-A la cultura y a los beneficios de la vida cultural.
— Miguel Valdés, Laguneros por la Paz
— Roberto Giacomán, Derechos Humanos Ibero
— Jorge Saucedo, Centro Miguel Agustín Pro Juárez'
— Jesús Rodríguez, segundo Visitador CDHEC
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