Kati no tomó a bien que sus padres adoptivos no le dijeran la verdad, cuando la sabían. (INTERNET)
En 1995 una pareja china abandonó a su hija recién nacida en un mercado debido a la pobreza y la política, en ese país, de que sólo puede haber un hijo por familia.
Junto a la bebé había una nota que explicaba la situación: "¡Oh, compasión para los corazones de padres y madres cercanos y lejanos! Gracias por salvar a nuestra pequeña hija y cuidar de ella. Si fuimos creados el uno para el otro, que el cielo nos permita encontrarnos en el Puente Roto de Hangzhou en la víspera del Día chino del amor [el Qi Xi] en 10 o 20 años", leía, según cita el ‘South China Morning Post’.
La niña fue adoptada por una familia estadounidense de apellido Pohler, quienes la llamaron Kati. Recibieron la carta de los padres biológicos, pero no dijeron nada a su hija, esperando hasta que ella preguntara por su familia.
Pasados diez años, en la fecha acordada en la carta, Xu Lida y su esposa Qian Fenxiang, los padres biológicos de la pequeña, acudieron al puente con un letrero, pero nadie llegó a buscarlos.
Los Pohler sin embargo, habían pedido a una amiga ir al puente. Ella llegó tarde y no vio al matrimonio chino, pero vio a unos reporteros que filmaban y les pidió revisar las cintas, ahí vio que los padres biológicos sí habían acudido al encuentro. Ella logró encontrar a la pareja gracias a que la historia creció como la espuma en China y les entregó varias fotografías de la chica.
Los Pohler aún así no dijeron nada a su hija, mientras la pareja china comenzó a acudir al puente cada año en la misma fecha.
No fue sino hasta 2016 cuando los Pohler le contaron la verdad a Kati, tras que ella preguntara por su origen chino una vez que, decidida a irse a estudiar a España, quiso saber más de su pasado pensando que la gente le preguntaría también sobre él.
Al enterarse de toda la historia Kati decidió contactar a sus padres biológicos y en agosto de 2017 por fin la familia pudo reencontrarse en el Puente Roto.
"Fue lindo verlos. Me sorprendió lo emocionada que estaba mi madre china. Lo primero que me dijo fue: 'Estás demasiado delgada, necesitas comer más'", contó la joven.
