Crónica Lerdense

Primera Parte

En 1864 Villa Lerdo era uno de los primeros centros urbanos modernos en la región que se formó cuando Benito Juárez le dio la categoría de Villa a la hacienda de San Fernando, y fue trazado por el Agrimensor Barbachano, auxiliado por un tronco de animales, con un arado de palo rayaron las calles y manzanas de la naciente Villa, abarcando una zona urbana con el nombre de Fundo Legal o área específica del poblado. Para 1879 esa zona creció y se amplió a dos manzanas por cada uno de los rumbos: al norte, al poniente y al sur, quedando un polígono ubicado por las calles de Chihuahua, Durango, Zacatecas y Coahuila. Ya en las últimas décadas del siglo XIX Lerdo tenía el dominio político en el Partido de Mapimì y el dominio regional en lo comercial, pues contaba con fuertísimas casas de comercio y casas bancarias de gran significado.

Más una vez tirada la vía férrea de Ciudad Juárez a México en 1883, tocó la municipalidad de la Villa y se instaló una Estación a 5 leguas de retirado. En ese tiempo porfirista de la paz y del progreso, se había desarrollado un proyecto para la creación de un polo de desarrollo económico y ferroviario para la entonces Villa de Lerdo, donde se contemplaba el entronque con la estación Lerdo del Ferrocarril Central Mexicano con las vías férreas del Ferrocarril Internacional Mexicano que venía de Piedras Negras. Desgraciadamente aparecieron elementos con intereses, tanto de fuerzas del poder económico de Torreón y políticos de la Ciudad de México que férreamente se opusieron, buscando todas las formas para que no se enlazaran las líneas férreas, así como lo marcaba el proyecto original.

Razón por la cual lograron en 1888 en el Rancho Torreón la instalación de dos estaciones, una del Central Mexicano y otra del Internacional Mexicano, de este último no entroncó con la de Lerdo y, por ende, impidiéndose así que fuera el crucero de ambas vías. Esto acabó de aniquilar a Ciudad Lerdo, pues desde entonces hubo una abrumadora emigración de vecinos hacía Torreón, de negocios comerciales y hombres de empresa radicados en la Ciudad Jardín. Más adelante en 1905 el Municipio de Lerdo sufre una transformación geográfica con un decreto que expide el gobernador Esteban Fernández cuando fue Gobernador del Estado, en que promovió la ley de División Territorial en el Estado y con la traición de políticos del gobierno de segregó la mitad del terreno de la municipalidad de Lerdo para crear lo que hoy se conoce como Ciudad Gómez Palacio, Dgo.

En 1914, la Compañía del Tlahualilo por medio de su departamento de Ingeniería elaboró un proyecto de la ampliación de la zona urbana de Ciudad Lerdo y Gómez Palacio para complementar una nueva estructura del fundo legal antiguo, el documento de ampliación del trazo iniciaba desde la hoy calle Chihuahua y del Parque Victoria de Lerdo tomando los lados por lo que fue la Calzada Lerdo, (hoy Bulevar Miguel Alemán), y el antiguo bordo del Tranvía Eléctrico de Lerdo a Gómez Palacio, con una superficie de terrenos de labrantío pertenecientes a la Hacienda de San Fernando, y a la hacienda de Santa Rosa.

Dentro del proyecto de urbanización realizado por la Cía. Tlahualilo en la parte de lo que hoy es Lerdo aparecía en el trazó una colonia con el nombre San Fernando. Este polígono marcaba al lado poniente del bordo del Tranvía Eléctrico de la Calzada Lerdo y al lado oriente sur del hoy (Bulevar Miguel Alemán) y del bordo de los tranvías, terminándose hasta donde hoy son los límites de ambas ciudades. Poco después, ese proyecto lo llevó a cabo el General ex-revolucionario antivillista, Gabriel Gavira Castro, como Gobernador Provisional de Durango y Comandante Militar del Estado, con la aplicación del decreto del 11 de abril de 1917, con el fin de unir en uno solo; los municipios de Lerdo y Gómez Palacio. Donde se manifestaba que la cabecera del municipio Unido llevaría por nombre "Ciudad Francisco Zarco" y las ciudades de Lerdo y Gómez Palacio conservarían su mismo nombre, pero con carácter de "Colonias" de la citada ciudad".

Además, se anunciaba "que mientras se construyeran los edificios necesarios para el ayuntamiento y demás oficinas públicas, las autoridades radicarían en Gómez Palacio". Al no concretarse este decreto en la Administración de Gabriel Gavira Castro, oriundo de la Ciudad de México, invadió la Administración Estatal de Domingo Arrieta, moviendo sus hilos políticos en el Congreso del Estado, diciendo que los Diputados que en gran mayoría formaban la Legislatura del Estado, pero de filiación netamente reaccionaria, de cierta manera impidieron que la Ley viniera a sancionar al decreto relativo a la fusión de los municipios de Lerdo y Gómez Palacio. Nuevamente el Ex Gobernador Gavira Castro informó al presidente municipal de Lerdo en un oficio de fecha 9 de octubre de 1919, que después de grandes esfuerzos por parte de los escasos Diputados Liberales a la cabeza de ellos don Urbano Luna; ha sido aprobada la fusión de dichos municipios. Y se congratulaba que esa gran señal de triunfo le era altamente satisfactorio y con la fusión de ambos pueblos resultaba benéfico para su prosperidad.

Fue precisamente que ese proyecto de Gavira, don Domingo Arrieta en ese tiempo Gobernador del Estado de Durango, hizo el intentó de aplicarlo y llevarlo a cabo por medio del decreto 117, donde se declaraban unidos los municipios de Lerdo y Gómez Palacio, en uno sólo. En el citado decreto se contemplaba la ocupación de la Compañía Agrícola, Industrial, Colonizadora del Tlahualilo, S. A., con la expropiación de esos terrenos necesarios para la urbanización y uniéndose a las dos ciudades, así mismo la intención establecer una Escuela Regional, Experimental Agrícola. Los terrenos adjudicados a la hacienda de San Fernando tendrían sus límites: Al N.E la parte urbanizada de la Ciudad de Gómez Palacio o sea la línea divisoria de los Municipios de Gómez Palacio y Lerdo, desde el extremo N:W. de los terrenos del Instituto Lavín hasta el Río Nazas; al N.W., luego, una línea paralela a la vía del Ferrocarril Eléctrico de Gómez Palacio y Lerdo, a mil ciento cuarenta metros al N.W., de la expresada vía, desde la citada línea de los municipios hasta un punto que, levantada una perpendicular a la vía se llegue a la esquina Norte, de la porción urbana de Ciudad Lerdo; hasta tocar la vía del Ferrocarril Eléctrico en la rama que va directamente de Ciudad Lerdo a Torreón.

Prosiguiendo así, la vía hasta el viñedo de la hacienda de San Fernando, donde se levantaría una perpendicular al N.E., de quinientos metros de longitud; en sus extremos se trazaría una perpendicular a esta última hacia el S.W, y paralela a la vía hasta tocar la parte urbanizada de Ciudad Lerdo, cuyo contorno se seguiría hasta el Río Nazas, desde el límite antes descrito hasta tocar la línea divisoria de los municipios. Este perímetro comprendía una superficie aproximada de quinientas hectáreas, quedando así los municipios unidos y al pago a la Compañía expropiada el valor de los terrenos conforme avalúo. Los comentarios sobre la fusión de estos municipios fueron en el sentido de que se buscó decretar y declarar unidos los municipios de Lerdo y Gómez Palacio, para instalar los poderes del Estado, en lo que se llamaría "Ciudad Francisco Zarco", como cabecera del municipio unido.

Por lo que se observa en el espíritu de este decreto, fue tal vez en el sentido de devolver a Lerdo el territorio original del municipio, pero ahora convertido con el nombre de Francisco Zarco. Continuará.