El presidente Enrique Peña Nieto declaró que hace tiempo que la Ley de Seguridad Interior dejó de ser solamente una valiosa propuesta para convertirse ahora en una imperiosa necesidad.
Expresó su confianza en que el Congreso de la Unión, atenderá con la urgencia que hoy se requiere esta importante iniciativa que brindará mayor certidumbre a las fuerzas armadas y a la sociedad mexicana.
"La actuación del Ejército y la Armada en apoyo a la seguridad se sustenta en su lealtad, su disciplina y apego a los valores y principios militares, pero no es suficiente", comentó.
“Hace falta un marco jurídico adecuado que regule la actuación de soldados, pilotos y marinos en tareas de seguridad pública, un marco que con absoluta claridad defina los medios y alcances del respaldo subsidiario que hoy brindan las fuerzas armadas en diversos estados y municipios”, expresó el presidente de la República.
Dijo que en forma complementaria a esta ley, el esfuerzo de dar una mayor certeza jurídica para las fuerzas armadas, debe ser acompañado de un proceso de fortalecimiento a las corporaciones de seguridad en los estados y municipios.
Al presidir la inauguración de la XI Brigada de la Policía Militar y la Unidad Habitacional en el municipio de San Pedro Coahuila que albergará a 3 mil 200 policías militares y sus familias, Enrique Peña Nieto expresó que los retos de seguridad pública exigen objetividad en el diagnóstico y que “la tarea aún no ha terminado”.
Peña Nieto hizo un amplio reconocimiento a las fuerzas armadas por su valiente contribución para recuperar la paz y tranquilidad en el país, expresó que al momento de servir a México actúan con absoluta entrega y lealtad y hoy más que nunca el país tiene militares mejor capacitados y mayores oportunidades de desarrollo.
Las declaraciones de EPN se dieron en La Laguna, en un marco en que organizaciones internacionales defensoras de los Derechos Humanos expresaron su preocupación por la eventual aprobación de dicha ley que para ellos representa los peligros de una militarización.
En la ceremonia de inauguración del complejo militar, en el que se invirtieron 980 millones de pesos, mezcla de recursos federales, del Gobierno de Coahuila, de Durango y empresarios coahuilenses, el presidente de la República estuvo acompañado por los titulares de la Sedena, Salvador Cienfuegos Zepeda; de la Marina, Vidal Soberón Sánz; el titular en funciones de la PGR, Alberto Elías Beltrán; el comandante de la XI región militar, Rubén Cerrano Herrera; los gobernadores Rubén Moreira, José Rosas Aispuro Torres y el electo Miguel Riquelme Solís.
Expresó su confianza en que el Congreso de la Unión, atenderá con la urgencia que hoy se requiere esta importante iniciativa que brindará mayor certidumbre a las fuerzas armadas y a la sociedad mexicana. (MARY VÁZQUEZ)
