Mientras que los contrabandistas transportan a los hombres adultos con mayor frecuencia, el número de mujeres, niños y unidades familiares que buscan transporte ha aumentado dramáticamente en los últimos años. (ARCHIVO)
Mientras los migrantes intentan cruzar a Estados Unidos como se pueda y por donde se pueda, como dijo el connacional Aurelio García Araujo, autoridades del vecino país los invitan a no ponerse en riesgo.
El paisano procedente de Michoacán comentó que “pues sí, las autoridades te dicen muchas cosas, que el peligro, que tengas cuidado, pero la gente lo que quiere es llegar al otro lado”.
Entrevistado en el parque Benito Juárez de esta frontera de Sonora, comentó que, en su caso, cree que lo más seguro es contratar un guía, a quien se le conoce popularmente como “coyotes” o “polleros”.
Expresó que el problema es que los guías cobran bastante dinero y muchas de las veces la gente no tiene, por lo que recurre a préstamos con parientes o endeudarse con los mismos guías, pero la mayoría no fían.
Mencionó que sí tiene trabajo en su estado de origen en los campos agrícolas, pero por lo que le han contado, en la Unión Americana puede ganar más dinero, lo que desea hacer por uno o dos años y después regresar a su tierra.
Por su parte, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos dijo que mover seres humanos como carga, paga miles de millones de dólares a las organizaciones delincuenciales y transnacionales de contrabando.
En un comunicado, explicó que el contrabando de personas es la internación ilegal de personas a un país mediante la evasión deliberada de las leyes de inmigración.
Observó que el ICE se desempeña como la principal agencia de aplicación de la ley de la Unión Americana responsable de la lucha contra el tráfico de personas.
"Los contrabandistas no tienen ninguna preocupación por la humanidad, ninguno. Es un negocio de dinero ", dijo Jack Staton, agente especial en funciones del ICE en El Paso, Texas, "ven a la gente como mercancía, como una forma de ganar dinero".
Con mayor frecuencia, Staton se encuentra con individuos que cruzan desde el área de Ciudad Juárez, México, hacia Texas y Nuevo México.
Las personas que buscan la entrada encubierta a Estados Unidos saben que deben pagarle a una organización por el transporte, expuso la instancia en el documento.
Las organizaciones de contrabando, a menudo asociadas con otras organizaciones criminales transnacionales y capaces de tomar ventaja de personas en circunstancias desesperadas, proporcionan ese transporte a un costo significativo.
El contrabando de personas en el sudoeste de Estados Unidos es un hecho cotidiano, mencionó.
"El Valle del Río Grande es el área más concurrida para la actividad de contrabando humano en los Estados Unidos en este momento", dijo Staton, "desde San Diego, California, a Brownsville, Texas, donde hay actividad todos los días".
El contrabando de personas opera como un negocio por contrato, pues existe una comprensión entre las organizaciones criminales transnacionales, los contrabandistas y las personas que buscan transporte pues consideran que intentar cruzar la frontera de manera independiente no es una opción.
Los contrabandistas escoltan a los inmigrantes ilegales a través del desierto, al otro lado de la frontera, para esconderlos en casas y llegar a sus destinos finales en el interior de los Estados Unidos, dijo.
Una parte de las tarifas de contrabando pagadas a las organizaciones criminales transnacionales ayuda a alimentar sus otras empresas criminales, afirmó.
Existen innumerables formas de contrabandear seres humanos y la mayoría de ellas no tienen en cuenta la seguridad personal o la comodidad, comentó.
Los contrabandistas mueven humanos como parte del transporte de carga, en vehículos, en barcos, en tractores, en cajas de automóviles en trenes y en automóviles y camiones que se transportan en trenes como carga. También utilizan opciones de transporte legítimas, como autobuses comerciales y vuelos.
Los migrantes indocumentados que viajan a Estados Unidos a menudo pagan tarifas adicionales por ciertos tipos de métodos de transporte; por ejemplo, una persona puede pagar dinero extra para el transporte en el remolque de un tráiler.
Explicó que ello porque consideran que la posibilidad de cruzar la frontera es mayor que a pie.
Pero si el viaje tiene lugar en el verano, las temperaturas pueden subir fácilmente por encima de los 38 grados centígrados en el camión y la situación puede volverse rápidamente peligrosa, advirtió.
En el documento, el agente de ICE avisó que subestimar el peligro potencial del contrabando humano puede tener un resultado mortal.
Como lo demuestran los recientes eventos en San Antonio, Texas, las tarifas de contrabando más altas pagadas a las organizaciones de contrabando no garantizan el tránsito seguro.
Los contrabandistas, en ese caso, habían asegurado a los extranjeros ilegales que su camión tractor tenía refrigeración. Diez personas murieron en tránsito, recordó.
"No importa lo que un contrabandista pueda decirle a un extranjero indocumentado, en el momento en que el extranjero es contrabandeado, el contrabandista ya no puede controlar las circunstancias", dijo Staton.
La falta de control no representa una crisis de conciencia para quienes manejan organizaciones de contrabando.
Mientras que los contrabandistas transportan a los hombres adultos con mayor frecuencia, el número de mujeres, niños y unidades familiares que buscan transporte ha aumentado dramáticamente en los últimos años.
A menudo se encuentran en riesgo de asalto y abuso como violación, golpizas, secuestro y robo, dijo. Los traficantes con frecuencia abarrotan alojamientos para dormir, y retienen alimentos y agua.
Además, las personas que son objeto de tráfico ilícito pueden ser forzadas a situaciones de trata de personas a su llegada a Estados Unidos o sus familias pueden ser extorsionadas.
Incluso, conociendo estos peligros, la mayoría de las personas que viajan con una organización de contrabando lo hacen voluntariamente, expuso.
Los extranjeros indocumentados que llegan a Estados Unidos a veces planean hacer solicitudes de asilo. En el año fiscal 2016, la Oficina Ejecutiva para la Revisión de Inmigración otorgó solo el 13 por ciento de las reclamaciones, incluidos los casos de miedo creíbles.
Puntualizó que la responsabilidad de hacer cumplir las leyes de inmigración le pertenece a ICE.
“Nuestro trabajo es identificar a los inmigrantes ilegales, ponerlos en procedimientos de deportación y deportarlos a sus países de origen", dijo Staton. "Para la gente gastar dinero y ponerse en peligro es un ejercicio inútil; una vez que lleguen a los Estados Unidos los encontraremos”, añadió.
"Para nosotros es una prioridad identificar y enjuiciar a los contrabandistas de personas que subvierten nuestras leyes y ponen en peligro la vida de las personas”, afirmó.
“También es nuestra prioridad capturar los fondos y activos mal habidos de la organización criminal transnacional, que son la sangre vital de estas empresas delictivas”, mencionó.
Comentó que todos deben tener la seguridad de que el Departamento de Investigaciones de Seguridad Interior de ICE no se detendrá ante nada para llevar a cabo su trabajo a fin de proteger la patria.
