Tras la odisea que vivió una regia en la Aduana del Aeropuerto del Norte al traer desde Canadá donativos para los damnificados por los sismos, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) justificó ayer los trámites, al aludir a lineamientos previamente establecidos.
El martes, Glenda Reyes arribó de Toronto en su avión personal, que venía cargado de apoyos para damnificados en Morelos, que le fueron inicialmente confiscados por personal del SAT con el argumento de que era material usado, y liberados el miércoles
En respuesta a una solicitud, el área de Comunicación Institucional del SAT afirmó que la mercancía nunca fue retenida, sino abandonada por Reyes y que permaneció en la Aduana mientras se cumplía con el trámite correspondiente.
"En todo momento se le brindó el apoyo a la pasajera en su procedimiento de donación", señaló la autoridad, "indicándosele que la ropa y calzado usado no podía ingresar al país y se le explicaron los motivos. De tal forma, la pasajera decidió dejar sólo esta mercancía en abandono.
"La mercancía que no correspondió a ropa y calzado usado nunca fue retenida. Se le apoyó a la pasajera a cumplir con las documentales para realizar la donación... La mercancía permaneció en la aduana en tanto se cumplía con dicho trámite".
Reiteró que, por disposiciones regulatorias prevalecientes y ajenas al SAT, no es posible introducir al País ropa y calzado usado.
El SAT sostuvo que tras el sismo del 19 de septiembre implementó medidas para agilizar el ingreso de donativos.
"El trámite fue atendido en tiempo y forma como todos los demás, y se brindó el apoyo en todo momento como trámite expedito", sostuvo la dependencia.