Mbappé y el París Saint Germain burlan las reglas

El abogado esloveno y presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, fue clarísimo: "No dejaremos que países compren jugadores". Y en la misma conferencia de prensa envió indirectamente varias amenazas que estaban dirigidas a los qatarís que manejan el París Saint-Germain. Pero como dicen en nuestros países "hecha la ley, hecha la trampa".

UEFA diseñó hace un par de años lo que se llama el Fair Play Financiero (conocido en inglés como "FFP"). La idea básica es que un Club que quiera jugar en competencias europeas, no puede gastar más de lo que genera.

Hay algunas excepciones, como la que un dueño puede poner 30 millones de euros de su propio dinero cada tres años, o que un equipo pueda perder cinco millones de euros en el mismo período, o que un equipo pierda más dinero si lo gasta en la cantera o en infraestructura. Pero la idea principal está ahí.

Ahora, lo que está haciendo el PSG con el fichaje a préstamo de Mbappé es circunscribir esas reglas. UEFA revisa los libros contables de cada equipo en un ciclo que va de uno a tres años, y en un acto insólito, ayer domingo reportó The Guardian que UEFA comunicó al PSG que no daría el visto bueno al fichaje de Mbappé por 180 millones de euros.

Evidentemente hay preocupación en el máximo organismo europeo porque el "FFP" queda muy mal parado en todo esto. Entonces, al PSG y al dueño ruso del Mónaco se les ocurrió esta brillante idea: el equipo monegasco le "presta" a Mbappé al PSG por un año con una cláusula de compra para la próxima temporada.

De esta manera, en los libros contables del PSG de esta temporada no aparecen los 180 mde que cuesta el fichaje.