Siglo Nuevo

Aurora íntima, la de rosados dedos

Una práctica sin riesgo de embarazo

Foto: Archivo Siglo Nuevo

Foto: Archivo Siglo Nuevo

REDACCIÓN S. N.

La exploración táctil es un modo de proceder al que suelen recurrir los jóvenes cuando arriban a esa etapa conocida como el 'despertar sexual'.

El fingering o dedeo es una técnica sexual que se vale del tacto para excitar y complacer a la pareja a través de la exploración de los genitales o del ano.

El manual de esta práctica, alternativa a la cópula, comienza con un mandato: lo primero y lo más importante, es estar cómodos.

Una idea que se debe tener presente es que cada persona es diferente y disfruta de cosas distintas de manera que la buena comunicación es esencial para lograr la experiencia más gratificante.

Esa idea va de la mano con una regla que aplica para cualquier práctica íntima: no forzar las cosas. Si una persona está insegura y dice 'no', su decisión debe respetarse. No debe olvidarse que se trata de compartir una experiencia placentera y si hay incomodidad lo mejor es detenerse.

Un mandamiento del fingering es la limpieza dado que se manipulan zonas muy sensibles del cuerpo humano. Hay que ir sin prisas, verificar que quien recibe la estimulación táctil la está pasando bien y recibir de buen grado las indicaciones hechas por la pareja cuando reclame algún cambio en las maniobras.

Se trata, desde luego, de ser gentiles y proactivos, esto implica probar algunos movimientos para observar cuáles consiguen las respuestas más placenteras. Una ventaja de usar los dedos es que se aprende con cierta rapidez qué es lo que le gusta a quien se pone en manos ajenas.

FUNDAMENTO

Se considera, erróneamente, que el fingering consiste en prodigar caricias y dar placer al lado femenino del género humano.

La descripción frecuente es que se trata de una práctica a realizar tanto en pareja como en forma individual, cuyo objetivo es aplicar el tacto ya sea en la vulva (parte exterior de la vagina) o en la zona del ano con miras a obtener gratas sensaciones y alcanzar el orgasmo. Por lo general, se asocia el concepto dactilar con la vulva ya que las terminales nerviosas a la entrada del aparato reproductor de las mujeres responden a los frotamientos y las caricias.

En realidad, los hombres también son destinatarios potenciales de algunas dosis de tacto ya sea en las áreas sensibles del pene o cerca del ano. Si se practica como una variante de masturbación, es como ascender un escalón más en el conocimiento acerca de las prácticas que una pareja puede compartir.

La exploración táctil es un modo de proceder al que suelen recurrir los jóvenes cuando arriban a esa etapa conocida como el 'despertar sexual'. El empleo de este recurso, que en un punto de mayor intensidad llega a la 'penetración digital' posee la ventaja de que excluye cualquier posibilidad de embarazo. Además, no se pierde la virginidad debido a las diferencias estructurales entre los dedos y el pene.

/media/top5/SNsexFing.jpg

Foto: Archivo Siglo Nuevo

BENEFICIOS

La experiencia en pareja acarrea beneficios como un mayor conocimiento físico tanto del otro como propio. Es frecuente que de la interacción salga reforzada la comunicación ya que un aspecto importante del dedeo provechoso implica establecer condiciones claras acerca de lo que se quiere y hasta donde se permite llegar. El acuerdo fortalece la confianza y ésta suele extenderse más allá del desarrollo de los íntimos actos. Otro beneficio es que las personas que han recurrido a esta forma de estimulación antes de incorporarse a la vida sexual activa, son más conscientes acerca de las necesidades de su media naranja.

En las mujeres, cuando el tacto se manifiesta con la habilidad suficiente, a través, por ejemplo, de un grato masaje vaginal, se convierte en un instrumento meritorio a la hora de adentrarse en el conocimiento de las sensaciones orgásmicas. En el caso de los hombres, es un recurso recomendado por muchos a la hora de abordar el tema de cómo retardar la eyaculación. Existe consenso a propósito de su utilidad como elemento del juego previo o ritual de encendido antes de la penetración tradicional, en el caso de que el coito venga contemplado en el plan de acción.

El fingering hace acto de presencia tanto en las actividades de parejas estables como en las de amantes pasajeros. Sin embargo, la categoría a la que se pertenezca no hace diferencia cuando se trata de adoptar medidas de higiene para prevenir el contagio de alguna enfermedad. Es indispensable tener las manos limpias y no llevar uñas largas, esto con el fin de que la pared vaginal, o bien el pene o bien el ano, no salga lastimado. Debe ponerse especial atención a que los apéndices dactilares estén libres de llagas o pequeñas cortadas. Entrar en materia en esas condiciones puede derivar en una infección. Tan importante es el aseo previo, como el posterior al acto. Al terminar la sesión deben limpiarse la zona genital y los dedos.

El dedeo durante la menstruación no es recomendable. La regla aumenta las posibilidades de contagio de alguna enfermedad en las zonas erógenas, en las manos, y en el área anal. No es estrictamente necesario que el tacto haya sido suavizado con alguna sustancia facilitadora. El estímulo dactilar suele funcionar como despertador de la lubricación genital femenina.

Si la mujer depositaria de las caricias tiene resequedad vaginal, humectar es aconsejable para prevenir dolores y quejas. Si el depositario del placentero tacto es un hombre, la lubricación favorece el surgimiento de sensaciones gratificantes ya sea en el pene o en el ano. En las parejas estables, el dedeo puede ser un sustituto de la penetración cuando factores como el agotamiento físico o el poco apetito sexual limitan a los actores.

Cuando el objetivo es ser en extremo precavido, se puede echar un ojo a aditamentos que contribuyen a redondear una experiencia segura y satisfactoria.

Por ejemplo, los condones de dedo son efectivos e higiénicos. Salieron al mercado en China, y aunque en México es difícil conseguirlos, es posible hacerse con ellos a través de Internet.

A la hora de practicar el fingering, y esto no hay que olvidarlo, el consentimiento es un elemento irrenunciable. Sus bondades están a la par de sus peligros, como la posibilidad de provocar desgarros. Realizarlo a la fuerza es considerado por varios códigos penales como abuso sexual o violación. Por eso, al elegir los caminos del tacto, hay que poner las cartas sobre la mesa y dialogar acerca de lo que se admite para evitar confusiones, enfermedades o desilusiones.

Aurora íntima, la de rosados dedos
Aurora íntima, la de rosados dedos
Aurora íntima, la de rosados dedos
Aurora íntima, la de rosados dedos

Leer más de Siglo Nuevo

Escrito en:

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Siglo Nuevo

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Foto: Archivo Siglo Nuevo

Clasificados

ID: 1373388

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx