Percepción. Bernardo González, aseguró que todo es para distraer la atención ciudadana de las irregularidades detectadas en el proceso electoral.
El líder de Acción Nacional, Bernardo González, aseguró que el inicio de la transición de Gobierno de Coahuila es una "simulación" para distraer la atención ciudadana de las irregularidades detectadas en el proceso electoral, mismas que ya son atendidas en el Tribunal Electoral.
Bernardo González indicó que Riquelme se rehúsa a responder cuestionamientos relativos a las impugnaciones de la elección de gobernador.
"Moreira y Riquelme serán en su momento juzgados por cada uno de los delitos cometidos, aquí no es Venezuela, la anulación será inminente", indicó.
Por su parte, el diputado electo Marcelo Torres Cofiño, calificó como un intento de presión a la autoridad electoral la exhibición pública del inicio de transición del Gobierno.
"Rubén Moreira ya se descaró, sabe que su abierto apoyo a la campaña del PRI les va a costar la nulidad de la elección y, por consecuencia, ya no les importa cuidar las apariencias y está dispuesto a imponer a su lacayo a costa de lo que sea", arremetió Cofiño.
El diputado electo señaló que el proceso de nulidad continúa en tribunales y confía en que los magistrados aplicarán estrictamente lo que la ley determina.
"¿Se excedieron en más de 5 % en los topes de campaña? Sí. ¿La diferencia entre el primero y el segundo es menor de ese porcentaje? También. Aquí no hay interpretaciones porque la ley es muy clara. El Tribunal no tiene más que cumplir con su deber que es respetar la ley", indicó.
Tras la elección de gobernador, alcaldes y diputados, el pasado 4 de junio, se presentaron 120 impugnaciones sobre los resultados. De ellos 44 son contra la elección gobernador.
Se denunciaron 14 presuntos actos irregulares. Todos causales de nulidad de la elección.
Aunado a ello, el pasado 17 de junio, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral analizó el dictamen donde se establece un rebase en los topes de campaña del priista Miguel Riquelme y el panista Guillermo Anaya por el 7 y 4 %, respectivamente.
Cabe recordar que el tope de campaña era de 19.2 millones de pesos.
